El Hospital General (Ruiz de Alda) repondrá la firma del arquitecto que lo trazó en 1950
La placa con el nombre del arquitecto autor del proyecto de Residencia Sanitaria Ruiz de Alda va a ser repuesta. Así lo ha conformado la actual directora-gerente de la Ciudad Sanitaria Virgen de las Nieves del que forma parte este hospital de referencia de Andalucía oriental.
En el caso del Hospital Ruiz de Alda, el proyecto fue firmado solamente por Aurelio Botella. Su nombre estuvo colocado en el mármol del hall de entrada. No se sabe en qué momento fue tapado, eliminado o perdido el nombre
La máxima responsable de la gestión de este centro sanitario, María Ángeles García Rescalvo, y los descendientes del arquitecto autor del proyecto, Aurelio Botella Henríquez, conocieron la desaparición o pérdida de la placa con el nombre del autor a través del artículo sobre los 70 años de historia del centro, publicado por El Independiente de Granada, 'Ruiz de Alda', la casa de salud por la que entró la modernidad, con la firma de Gabriel Pozo Felguera. Precisamente, este martes conmemora el colectivo biosanitario esta importante efeméride con una serie de actos de tipo social, musical y cultural en el Palacio de Congresos.
Aurelio Botella y sus colaboradores situaban grabados sus nombres a la entrada de los edificios que construyeron entre principios de los años treinta y los setenta del siglo pasado. Fueron más de ochenta los hospitales, residencias y consultorios los que levantaron esos años por toda España. En el caso de Granada, sus firmas quedaron grabadas a la entrada de la Facultad de Medicina-Clínico San Cecilio, ya que ganaron el concurso convocado en 1928 y acabaron las obras en 1954. Sebastián Vilata y Aurelio Botella dejaron sus nombres en la base de las columnas de acceso principal a la Facultad, en la Avenida de Madrid.
El fin no es otro que hacer justicia al autor del que fue primer gran centro hospitalario de Granada a partir de su entrada en funcionamiento en 1953
En el caso del Hospital Ruiz de Alda, el proyecto fue firmado solamente por Aurelio Botella. Su nombre estuvo colocado en el mármol del hall de entrada. No se sabe en qué momento fue tapado, eliminado o perdido el nombre. La directora-gerente se ha comprometido a buscar la placa, en caso de que esté retirada en algún almacén, o a grabarla de nuevo si no aparece. El fin no es otro que hacer justicia al autor del que fue primer gran centro hospitalario de Granada a partir de su entrada en funcionamiento en 1953.