Un acto de justicia y dignidad

"Me parece mentira, no creía que iba a llegar este momento. Creí que me iba a morir y se iba a quedar sin recoger", contaba este viernes por la tarde a los periodistas Trinidad García Esteban poco antes de recibir los restos de su hermano, José García Esteban, maestro que ejercía en la escuela de la fábrica de El Fargue que fue fusilado una madrugada de agosto de 1936 en el Barranco de Víznar. Y, aunque es una historia de dolor y tristeza, añadía, para ella, para toda su familia, era "una alegría poderlo recoger".
José García Esteban, "un maestro de la República, de otra pasta"
Cogiéndote la mano, Trinidad daba las gracias a todas las personas que habían hecho posible recuperar los restos de su hermano 89 años después. Como transmitió a quienes llenaban el salón del albergue de Víznar José Miguel Gallardo, el mayor de los sobrinos de José García Esteban, que habló en nombre de la familia, para todas y todos ellos era "un gran día". "Después de 89 años y tanto silencio, miedo, penalidades y frustraciones y, sobre todo, desconocimiento de dónde podían estar sus restos", habían conseguido localizarlo, identificarle y, ahora, enterrarlo.
Era un maestro, uno de los colectivos masacrados por el franquismo, que tenía "gran vocación", que no se limitaba a la enseñanza y que se interesaba por el bienestar y la salud de su alumnado. "Así eran los maestros de la República, de otra pasta", dijo con orgullo.
Junto a la familia de García Esteban se encontraban las de José Raya Hurtado, Carmen Rodríguez Parra, 'madre Carmela', y Francisco Soriano López, las otras víctimas entregadas este viernes.
Esa sensación agridulce, la de recibir con alegría los restos de un ser querido arrebatado y al que la dictadura franquista quiso sepultar y condenar al olvido para siempre, también embargaba a María Ángeles Martín y a su hija Alba, nieta y bisnieta, respectivamente, de Francisco Soriano López, nacido en Íllora y que vivía en Fuente Vaqueros cuando fue detenido y asesinado. Dedicado a las labores del campo y que también trabajaba como escribiente en la Perra Gorda, formó parte del Sindicato de Labradores, que durante la II República se llamó El Porvenir, vinculado a UGT.
Francisco Soriano será enterrado junto a su hija, que durante toda su vida deseó encontrar "aunque solo fuese un huesecico"
Sus restos descansarán junto a los de su hija Palmira, la madre de María Ángeles. Ella no quería marcharse de este mundo sin encontrarle, "aunque solo fuese un huesecico". "Por fin será enterrado al lado de su hija", exclamó María Ángeles que señaló la "contradicción" que había sentido al tener en sus brazos la urna funeraria con los restos de su abuelo: "Lo que he sentido es que lo tenía en brazos y tenía que haber sido al revés, que él hubiera tenido en sus brazos a sus nietos, pero no pudo". Una de las hijas de Francisco Soriano aún vive, Amor, de 91 años, aunque su estado de salud ya no le permitió asistir al acto. Su sobrina ha contado que hace tres años le hizo prometerle que, aunque ella ya no se diera cuenta de las cosas, si lo encontraban se lo dijeran. Así lo hicieron. "Se echó a llorar y dijo unas cuantas palabras que no se pueden decir. Luego probablemente lo olvidaría, pero lo lleva en su alma y en su corazón".
Ángela Raya, nieta del socialista José Raya Hurtado, tipógrafo de profesión que también trabajaba como empleado de la caja de Previsión Social de Andalucía Oriental, fundador del grupo de estudios teosóficos de Granada y destacado militante de UGT, organización de la que fue vicepresidente provincial, expresó que veía el acto como "una bienvenida" en el que se le volvía a poner el nombre que le quisieron borrar. En Víznar se habían reunido nietos, bisnietos y tataranietos de José Raya Hurtado. Algunos de ellos, contó Ángela, ni siquiera habían coincidido antes.
"No esperaba llorar, pero ha sido inevitable. Las familias estamos celebrando que los hemos recuperado, que no nos rendimos y que seguimos en pie después de 89 años", afirmó para recordar a los miembros de su familia que durante años habían buscado al abuelo. "Mi padre, sus hermanos, mis tías"...
Y, aunque ella acaba de recibir los restos de su abuelo, se ofreció para seguir acompañando a las familias que aún albergan la esperanza de encontrar a los suyos.
Los familiares que intervinieron en el acto tuvieron palabras de agradecimiento para el equipo que lidera Francisco Carrión, que también participó en el acto y cuyos integrantes entregaron los restos junto a las autoridades. Entre ellos y las familias se ha establecido un gran vínculo, forjado por Fran Carrión Jiménez, a quienes las familias agradecen su sensibilidad y disponibilidad.
Y entre las personas más mencionadas durante el acto, Silvia González. Por sus investigaciones -que firma junto a José Peña y Agustín Linares-, publicadas en El Independiente de Granada, que están dando luz a los familiares, recuperando datos desconocidos para ellos. Con cariño agradecieron que los acompañe.
Contó Francisco Carrión que, durante las diferentes campañas de exhumaciones, han abierto 29 fosas y han recuperado los restos de 194 víctimas del franquismo. En la última había 28 víctimas. Alberga Carrión la esperanza de que entre ellas esté Salvador Vila, el que fue rector de la UGR, que da nombre a la Cátedra de Memoria Democrática impulsada por la universidad y el Ministerio de Política Territorial y Memoria Democrática.
Carrión y su equipo no pudieron contener en algunos momentos la emoción. Sus lágrimas reflejaron que, como dijo el profesor, el acto celebrado en Víznar era "lo mejor de nuestro trabajo, recompensado" al poder entregar los restos a las familias. "Más allá de lo profesional, los sentimientos son muy fuertes", dijo para desear que no vuelva a repetirse lo sucedido, que "tanta sangre costó.
'A las barricadas' por Madre Carmela
Ángel González, nieto de Carmen Rodríguez Parra, 'Madre Carmela', así lo expresó, mencionando a Silvia y a Fran Andújar. "Su trabajo nos ha permitido acercarnos a nuestra abuela. Nuestro conocimiento se limitaba a lo que Carmelilla, su hija pequeña, había transmitido a su hijo". Pero, ni los viajes que ellos hicieron a Granada para "conocer a los primos de aquí y ver si podían explicarles algo" ni los que después hicieron sus padres, Pablo y Nieves, "contaron mucho". Fue a la muerte de sus padres cuando él encontró "mucha documentación de la que jamás mi madre nos había hablado". Documentación en la que figuraban Antonio López Capel y la propia Carmen, los libros de Ian Gibson y Molina Fajardo y "un monedero de mano, con un trozo de papel escrito con la caligrafía de mi madre: Monedero de mi madre devuelto de la cárcel cuando la iban a matar", contó sin poder contener la emoción y las lágrimas.
En 2023, al buscar por internet relatos y noticias documentados sobre su abuela, "tuve la gran suerte de descubrir lo que Silvia había escrito y publicado en El Independiente de Granada". El 5 de abril de 2023, contó, mantuvo la primera conversación telefónica con Silvia. "Hola, Silvia, soy Ángel Gonzalez, nieto de Carmen Rodríguez Parra. En las películas los silencios se ensayan, en nuestro caso fue sincero. Hasta que se deshizo", contó Ángel que conoció el anarquismo, el compromiso y su dedicación a los demás de Madre Carmela también con la ayuda de las extraordinarias investigaciones del historiador Fran Andújar. Ángel, que todovía está "flipando" con el último artículo de Silvia y los datos que ha reunido sobre Madre Carmela.
Como trasladó durante su intervención, tras recibir los restos de su abuela, para él había sido un honor conocer a Carrión y al equipo encargado de la "descomunal tarea" de las exhumaciones.
Más información:
Las biografías:
Artículos y reportajes publicados en El Independiente de Granada sobre las víctimas identificadas:
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Carmen Rodríguez Parra. La mujer identificada en Víznar símbolo del anarquismo granadino
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Carmen Rodríguez Parra, 'Madre Carmela'
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José Raya Hurtado, el viejo socialista que proclamó la República
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"Las bombas sobre Granada y los trabajadores del Fargue. Grupo de Víznar del 25 de agosto (I)"






































