Politizar el tren

Blog - Reflexiones del Por Venir - Chema Rueda - Miércoles, 31 de Agosto de 2016
Una de las movilizaciones de la Marea Amarilla.
Miguel Rodríguez
Una de las movilizaciones de la Marea Amarilla.
Se recurre con demasiada frecuencia, en mi opinión, al término "politizar" en sentido peyorativo o negativo. Seguramente se trata de huir, con ello, de una cierta acepción coloquial del término. Acepción que equipara la política o lo político con algo malo por definición, pernicioso, perjudicial. En contraposición a otra cosa, siempre por definir, que se supone que es beneficiosa, positiva y buena. Pero que, de ninguna manera, renuncia a usar la política para la consecución de sus objetivos. Que, naturalmente, son, porque no pueden ser otra cosa, de naturaleza política.
 
Valga esta introducción, más teórica que retórica, para reflexionar, constructivamente, sobre el sentido y significado de las diversas acciones movilizadoras y reivindicativas que se están planteando en Granada al hilo del grave aislamiento ferroviario que sufrimos y al debate sobre la llegada del AVE a nuestra provincia y a nuestra ciudad. Acciones todas ellas legítimas, además de necesarias, y acciones todas ellas que precisarían de una mayor coordinación para conseguir más eco social y más éxito. Y por supuesto acciones, provengan de las instituciones públicas o de los colectivos sociales y ciudadanos (partidos políticos y sindicatos incluidos, sólo faltaría) guíadas por un objetivo político nítido: la llegada soterrada del AVE a Granada y la recuperación de nuestras conexiones ferroviarias para paliar nuestros déficits de comunicación e imbricación en el territorio andaluz y español.
 
Por tanto, claro que el debate de nuestras infraestructuras ferroviarias es un debate político. Político es el debate sobre las prioridades presupuestarias que se determinan desde los poderes públicos. Políticas son las decisiones sobre las prioridades de ejecución de las diferentes infraestructuras presupuestadas, y mucho más si se adoptan en periodos de "clima electoral". Políticas son las responsabilidades asumidas o por asumir por los distintos representantes de la voluntad popular. Políticas son las renuncias y políticos son los desmarques que se hacen en función de otros intereses. Y política, muy política, es la voluntad de quien se empeña en mantener la llama de la reivindicación y de la justicia en materia ferroviaria para Granada.
 
De modo que asumamos que la demanda de mejores conexiones ferroviarias para Granada, para que ésta sea fuerte y representativa, ha de ser un clamor unánime de la ciudadanía, de los agentes sociales y económicos y del tejido social. Y que debe estar liderada por el alcalde de la ciudad. Que el anterior alcalde y su partido hicieran vergonzosa renuncia a este liderazgo es problema de ellos. Y asumamos también, que la acción de los agentes políticos para la consecución de este objetivo político no es sino la natural consecuencia de la evidente naturaleza política del asunto.
 
Imagen de Chema Rueda

Nacido en Guadix (Granada) en 1963, por tanto de la generación de "A hard days night" y "Satisfaction". Licenciado en Derecho por la Universidad de Granada y funcionario de Administración Local, grupo A, trabaja en el Edificio de Los Mondragones. Fue concejal del PSOE en el Ayuntamiento de Granada (desde 2003 y hasta junio de 2015. Ha sido Secretario General del PSOE de la ciudad de Granada entre 2008 y 2017 y Miembro del Comité Federal del PSOE desde 2017 a 2021. Actualmente es miembro del Comité Director del PSOE-A. Me apasiona escribir (lo que pienso), debatir y participar en la vida pública, desde todos los ángulos posibles. Me duelen bastantes cosas de la vida y de la política actual, y no pienso dejar de intentar arreglarlas. Me apasiona la vida, la amistad, la Alpujarra y el Atlético de Madrid.