Dos años más independientes
Dos años más independientes, con más perspectiva, con enfoques diferentes, con más pluralidad y menos corsés. Dos años con más opciones, con nuevas visiones, incluso con algunas emociones. Con más información, con mejor opinión, con toda la libertad.
Con posibilidades reales, y no virtuales, para la controversia, para el contraste, para la réplica, siempre sumando, como es la vida, y siempre agitando, como debe ser la vida. Aprendiendo del conocimiento de otras y otros, de las visiones del resto, de los puntos de vista de gente que tiene vista, y que, libremente, la comparte. Y que, además, gustosamente, acepta la opinión diferente, nunca contraria, sino complementaria; jamás negativa, sino propositiva. Obviando, por inexistente, la verdad absoluta, pero buscando, en cambio, cada pequeña verdad, pues a partir de ellas, se puede avanzar.
Satisfecho y orgulloso de formar parte de la familia "independiente" granadina, de contribuir al pensamiento sin ataduras ni argumentarios, pues para el mismo ya hay espacio más que suficiente, y seguramente así deba ser. Como también debe ser la difusión de las pequeñas cosas que, a veces, son las más grandes en la vida de una comunidad; la circulación de las ideas heterodoxas, las que rompen la aburrida cotidianeidad; la trasgresión de lo políticamente correcto, sobre la base de que en política, casi nada debe ser ya sólo correcto.
Un agradable acontecimiento el alcanzar dos años en la parrilla. Con esfuerzo y sudor, seguramente con alguna incomprensión, puede que hasta con sorpresa, pero ya dos años. Haciendo realidad la máxima de que "alguien tiene que contarlo", pues se quiera o no se quiera, "lo que es, es", y además, nunca va a dejar de serlo. Por suerte.
La mejor felicitación colectiva para este segundo aniversario, creo que es emplazarnos todos y todas, y mucha gente más, para el tercero. Dicho queda.