El grupo popular de La Zubia ha denunciado “el proyecto del alcalde, apoyado por el PSOE con la aprobación del presupuesto del 2016, hoy en vigor, para construir al pie del Parque Natura de Sierra Nevada -donde se ubica la piscina cubierta, instalaciones deportivas y centros educativos- edificios de cuatro plantas, prohibidos por al actual Plan de Ordenación Urbana”.

Así lo ha afirmado su portavoz, Inmaculada Hernández, quien ha reprochado al primer edil que pretenda cambiar dicho plan “por la puerta de atrás”, en el pleno que se celebrará mañana, y con una “triquiñuela” mediante “el Plan Municipal de Vivienda y Suelo”. “Un truco de mal alcalde para cambiar la forma de ordenar las viviendas de La Zubia”, apostilló.

Los populares se oponen a que “en la mejor zona de La Zubia, de esparcimiento, que se caracteriza por la presencia de casas con su parcela de unos 100 metros, el alcalde meta edificios de cuatro plantas”, un auténtico “ladrillazo urbanístico y un caso de especulación porque las parcelas quiere venderlas a un precio por debajo del mercado”, afirmó Hernández.

Por ello, la portavoz ha asegurado que el PP no puede consentir “que se fulmine el patrimonio de todos los vecinos a estos precios y que se construyan mastodontes urbanísticos a las puertas del parque natural”.

Otro aspecto que preocupa a los populares es que estos edificios “pretenden destinarse a viviendas sociales” porque, opinan, “no se pueden agrupar todas las viviendas sociales en un único lugar”, un “modelo caduco que ya se ha demostrado que no funciona” dando lugar a la consolidación de urbanizaciones, caracterizadas por “problemas de convivencia, pequeña delincuencia y, en definitiva, inseguridad en el municipio”.

Hernández se ha mostrado a favor de la construcción de viviendas sociales pero siempre “de forma ordenada, tuteladas por los servicio sociales y diseminada de manera que se integren en el municipio” no “una macrourbanización” en un lugar concreto. Según ha declarado, esto ya existe en el municipio “en los edificios de Visogsa, donde son constantes los problemas”, mostrando que este modelo “no funciona”, insistió.