El PP celebra fin del botellódromo pero estará "vigilante" para evitar "un botellón en cada plaza"
El grupo municipal del Partido Popular en el Ayuntamiento de Granada se ha felicitado por el cierre del ‘botellódromo’ pero ha advertido de que, a partir de ahora, estará “vigilante” para asegurarse de que se cumplen las ordenanzas y de que Granada no se convierte en una ciudad “de botellones en cada plaza”.
La portavoz del grupo, Rocío Díaz, ha recordado que el cierre de ese espacio era uno de los puntos del acuerdo de gobernabilidad al que el PP y Ciudadanos llegaron tras las elecciones municipales de 2015. “A partir de ahí empezamos a trabajar y en marzo, con el consenso de todos los demás grupos, adoptamos la decisión de que dejara de funcionar el 1 de septiembre, como así ha ocurrido”.
La concejal, no obstante, entiende que el nuevo gobierno del PSOE ha procedido al cierre sin haber adoptado todas las medidas necesarias para evitar que a partir de ahora proliferen los grupos de jóvenes “bebiendo en cada esquina y cada plaza de la ciudad”. En cuanto a las medidas alternativas propuestas por los socialistas, los populares también tienen sus dudas en cuanto a que resulten eficaces.
“Aunque estamos contentos por el cierre del ‘botellódromo’, eso no quita para que sintamos cierta preocupación ante la posibilidad de que el problema de fondo subsista”, ha apuntado la portavoz, que ha añadido que los granadinos “no se merecen que su ciudad se llene de botellones”.
Lo fundamental, ha subrayado Rocío Díaz, es que se cumplan “estrictamente” las ordenanzas en lo referente al consumo de alcohol en la calle y que se actúe “aplicándolas con todo el rigor” para combatir el problema. “Vamos a ser muy exigentes en ese sentido, porque tenemos que evitar por todos los medios la mala imagen que da a Granada y los numerosos problemas que provoca el consumo de alcohol en nuestras calles y plazas”, ha finalizado.