La Cuesta de Santa Inés, en el tramo donde está situada la Casa Ágreda, ha tenido que ser cerrada al tránsito peatonal después de que se hayan registrado desprendimientos en inmuebles. 

Lo ocurrido evidencia, a juicio del portavoz del grupo socialista en el Ayuntamiento de Granada, "la dejadez y el abandono" del patrimonio. Por ello, ha exigido al gobierno bipartito que sea "sensible" y ponga en marcha un plan de rehabilitación del entorno y la puesta en uso de la Casa Ágreda, recuperada para la ciudad en el anterior mandato por vía judicial tras la cuestionada venta durante la etapa del PP.

La Casa Ágreda es hoy, en palabras de Cuenca, "lo que tiene que ser, de los granadinos", un logro que ha atribuido a la movilización ciudadana para que volviera a ser patrimonio de la ciudad y a la gestión de su gobierno en el anterior mandato.

Ha lamentado que el entorno presente "degradación" y ha pedido al gobierno local que "se ponga a trabajar de forma seria, que la proteja y rehabilite". "Esto es velar por la ciudad de la cultura", ha dicho Cuenca a los periodistas. 

La venta de la Casa Ágreda quedó anulada por parte de un Juzgado de Primera Instancia. La sentencia, en el proceso promovido por el anterior gobierno local socialista, el contrato quedó resuelto y restituida la propiedad para el Ayuntamiento de Granada. La vía penal, que investigaba presuntos delitos de malversación y prevaricación en la venta del inmueble, en un procedimiento abierto en su día a raíz de la denuncia de la Fiscalía y en el que actuaron como acusación el grupo Vamos Granada y también el empresario Ramón Arenas, ha sido archivado por el juez y en un escrito reciente la Fiscalía ha respaldado esa decisión judicial.