La dirección del Distrito Sanitario Granada Metropolitano ha mostrado "su más rotunda condena" a la agresión sufrida el pasado 8 de octubre por una médica que desarrollada su labor en el Servicio de Urgencias del Centro de Especialidades Zaidín-Granada, lamentando profundamente el daño sufrido por esta profesional.

Los hechos ocurrieron después de que una usuaria exigiera atención inmediata para su hijo. Tras conocer la agresión, la dirección del centro activó el Plan de Prevención y Atención de las Agresiones del Servicio Andaluz de Salud (SAS), que pone a disposición de sus profesionales asistencia sanitaria y jurídica, así como apoyo psicológico en caso de que lo demanden.

Responsables del Distrito Sanitario se han puesto en contacto con la médica agredida para interesarse por su estado y ofrecerle su apoyo personal e institucional. El Plan de Prevención y Atención de las Agresiones del SAS fue impulsado en 2005 por la Consejería de Salud con el objetivo fundamental de dotar a los profesionales de la sanidad pública de las medidas de seguridad y la formación necesarias para minimizar las posibles agresiones que puedan sufrir en sus centros de trabajo.

La agresión física o intimidación grave contra profesionales sanitarios en el ejercicio de su función pública asistencial viene recogida en el Código Penal como delito de atentado contra la autoridad, y así se han dictado sentencias en diferentes casos con penas que oscilan entre los 12 meses y los 3 años de prisión, según ha recordado la Junta.

El Distrito Sanitario Granada Metropolitano manifiesta una vez más y de forma contundente su repulsa a este tipo de actuaciones para las que no hay justificación posible y contra las que todos debemos hacer frente común. Se trata de un problema de violencia contra el que hay que tener ‘Tolerancia Cero’.