La Biblioteca Universitaria, Premio Francisco Izquierdo de Estudios Literarios que concede la Academia de Buenas Letras
La Academia de Buenas Letras de Granada, en su junta ordinaria del pasado 26 de junio, otorgó el Premio Francisco Izquierdo de Estudios Literarios sobre Granada 2017 a la Biblioteca Universitaria de Granada, única que posee el sello de Excelencia Europea 500+, y única biblioteca española que ostenta el Premio Iberoamericano de Calidad. También se concedió el premio Francisco Izquierdo al escritor Rafael Rodríguez Almodóvar, cofundador de la revista literaria "Extramuros".
El premio institucional será recogido por María José Ariza Rubio, directora de la Biblioteca Universitaria de Granada, en el acto de apertura del curso 2017-2018 de la Academia de Buenas Letras de Granada que se celebrará el 23 de octubre de 2017 en la Sala Máxima (Espacio V Centenario) de la antigua Facultad de Medicina, y en el que hará su ingreso como académico honorífico el escritor y Premio Príncipe de Asturias de las Letras Antonio Muñoz Molina.
Según ha informado la Universidad, la vida de la Biblioteca Universitaria de Granada arranca prácticamente con la fundación del Estudio General de Lógica, Filosofía, Teología y Cánones, que se gestó en la visita que realizó a la ciudad Carlos V en 1526.
A lo largo de la segunda mitad del siglo XIX y los comienzos del XX se van configurando las líneas de la moderna Biblioteca Universitaria. La estructura misma de la Biblioteca va cobrando mayor complejidad, y de ella se van desgajando las distintas bibliotecas de Facultades, Seminarios y Cátedras, en distintos edificios y con fondos cada vez más especializados. Cada Biblioteca se dota de un catálogo propio, tanto alfabético como sistemático para control e información de sus fondos, a la vez que la Biblioteca General cuenta con un catálogo central de estructura análoga. La Biblioteca del Centro ocupa un lugar importante y la tendencia general es la de centralizar fondos, servicios y presupuestos, para lograr una mayor rentabilidad de los recursos humanos y económicos.
Desde 1990, se cuenta con un presupuesto centralizado para inversión en monografías, publicaciones periódicas y encuadernación. Este presupuesto se complementa con los recursos que aportan los Centros, Departamentos, Grupos y Proyectos de Investigación.
En la actualidad los fondos que alberga la Biblioteca están constituidos por más de 1.247.770 de registros de ejemplar y más de 632.691 libros electrónicos; las publicaciones periódicas en papel son 13.758 títulos y las electrónicas 48.189. Estos fondos (excepto los de formato electrónico que se consultan en línea) se distribuyen por los distintos puntos de servicio, coincidiendo su temática con los estudios impartidos en el centro donde se halla situada cada biblioteca. El fondo antiguo se encuentra ubicado sobre todo en la Biblioteca del Hospital Real, y en las Facultades de Filosofía y Letras, Derecho, Medicina y Farmacia. La primera posee unos 80.000 documentos, de los cuales 63.938 están informatizados, entre los que podemos citar: 60 incunables, 4.056 impresos del s.XVI, 9.622 del s. XVII, 10.136 del XVIII, y 24.400 del siglo XIX. También cuenta con 1.800 manuscritos.
La Biblioteca Universitaria de Granada está compuesta por la biblioteca del Hospital Real y por las bibliotecas que sirven a las Facultades, Escuelas Técnicas Superiores y otros centros o servicios; además cuenta con otras unidades de gestión técnica y coordinación cuya actuación afecta al conjunto de bibliotecas de la Universidad de Granada (UGR). El total de puntos de servicio es de 21.
De acuerdo con el Artículo 14 del Reglamento de la Biblioteca Universitaria de Granada, se consideran usuarios de la misma:
• Todos los miembros de la comunidad universitaria de la UGR, así como los de centros adscritos a la misma.
• Profesores, investigadores, becarios, alumnos y personal de administración y servicios de otras Universidades en estancia oficial en la Universidad de Granada.
• Las personas que no pertenezcan a alguno de los grupos anteriores y deseen hacer uso de los servicios de la BUG de acuerdo con las reglamentaciones y convenios previstos.
Además, y como aportación social, la BUG facilita, en la medida de sus posibilidades, la utilización de sus instalaciones, fondos y servicios por parte de cualquier ciudadano.