‘Nuestra Lucha’, 45 años del periódico clandestino de CCOO en Granada
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En su primer número, en 1973, se publicó un homenaje a los tres obreros asesinados durante la Huelga de la Construcción de 1970
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Este periódico artesanal era el único modo de conocer las denuncias por abusos de empresas y empresarios
En realidad, ‘Nuestra Lucha’ había nacido poco después de Mayo del 68 como hoja suelta de comunicación entre los miembros de las incipientes Comisiones Obreras, surgidas tímidamente en Granada en 1967. Antes de 1973 fueron publicados al menos cuatro números, ya que para la refundación de este periódico clandestino en julio de 1973 se le consideraba el número 1 de la 4ª época.
‘Nuestra Lucha’ había nacido poco después de Mayo del 68 como hoja suelta de comunicación entre los miembros de las incipientes Comisiones Obreras, surgidas tímidamente en Granada en 1967. Antes de 1973 fueron publicados al menos cuatro números, ya que para la refundación de este periódico clandestino en julio de 1973 se le consideraba el número 1 de la 4ª época
Hace tan sólo 45 años que salió “en serio” del primer órgano de comunicación de CC OO en Granada y parece que hace siglos. En primer lugar, por la precariedad técnica con que era elaborado el periódico; utilizaron una impresora de las llamadas vietnamitas. Se trataba de un trabajo sumamente artesanal plasmado sobre un cliché con una máquina de escribir. Los titulares se hacían con una plantilla de rótulos de las empleadas en los colegios; el fin era evitar que la brigada político-social pudiese identificar la letra de los autores. Los lectores, por lo general, disculparon aquella precariedad técnica porque lo importante era el contenido.
La noticia de apertura de aquel primer periódico de CC OO no podía ser otra que recordar la muerte de tres trabajadores por disparos de la Policía Armada; fue el primer homenaje periodístico a los obreros caídos durante la protesta a las puertas de Sindicatos, en la actual Avenida de la Constitución (actual hotel ABBA).
Para el 21 de julio de 1973, ya se consideraban obsoletas las mejoras conseguidas tras la Huelga de 1970. No fueron demasiadas. En 1973 se continuaba con una jornada laboral mínima de 48 horas semanales (aunque lo normal eran 56), con falta absoluta de higiene y condiciones de seguridad en las obras. Recordemos que por entonces Granada experimentaba un enorme boom constructivo. Se exigía un salario mínimo de 500 pesetas, las cotizaciones sociales a cargo de la empresa, 30 días de vacaciones, etc. Con ojos de hoy, aquellas condiciones laborales de hace tan sólo 45 años eran de verdadera esclavitud.
Por ‘Nuestra Lucha’ pudimos conocer denuncias concretas que se hacían sobre empresas y empresarios de la provincia de Granada que incumplían las condiciones laborales. (Acompaño varias páginas de ‘Nuestra Lucha’ para que los lectores se hagan una idea de los problemas laborales que existían y nunca pudieron ser conocidos a través de los medios de comunicación habituales).
Las Comisiones Obreras y Campesinas en Granada
Las Comisiones Obreras y Campesinas surgieron tímidamente en Granada a partir de las elecciones sindicales de 1966. Fue el momento que aprovecharon trabajadores descontentos con el régimen franquista para camuflarse en los sindicatos verticales. Granada no contaba con una industria potente, pero sí con todo lo relativo a construcción, maderas, algo de metal-química, transportes y en la Caja de Ahorros. La mayoría de trabajadores comprometidos provenían de jóvenes parapetados tras el comunismo clandestino. Los viejos cuadros del Partido Comunista procedentes de la guerra y posguerra habían sido desbaratados en las redadas de 1961. A ellos se fueron sumando poco a poco algunos curas reformistas.
Granada en los 70. Se ve en construcción la Pirámide y la torre de Doctor Olóriz.
Comisiones Obreras fue calando en círculos obreros de la periferia de Granada, así como en los pueblos del cinturón con centros industriales y grandes empresas agrarias: Maracena, Albolote, Atarfe, Pinos Puente, Peligros. Más alejados, Motril, Guadix e Iznalloz. Sus dirigentes salieron principalmente de la zona de Cartuja, la Virgencica y Zaidín. La fuerza principal de CC OO radicaba en la construcción e industrias afines.
Comisiones Obreras fue calando en círculos obreros de la periferia de Granada, así como en los pueblos del cinturón con centros industriales y grandes empresas agrarias: Maracena, Albolote, Atarfe, Pinos Puente, Peligros. Más alejados, Motril, Guadix e Iznalloz. Sus dirigentes salieron principalmente de la zona de Cartuja, la Virgencica y Zaidín. La fuerza principal de CC OO radicaba en la construcción e industrias afines
Las representaciones en los pueblos eran a título individual. En los años sesenta y primeros setenta nunca estuvieron organizados en comités; tampoco la escasa actividad empresarial de la provincia propiciaba grandes masas de empleados.
La primera vez que salió a la luz el nombre de Comisiones Obreras y Campesinas de Granada fue el 27 de octubre de 1967 con motivo de una especie de jornada de lucha que consistió en llevar un escrito al Delegado Provincial de Sindicatos desde el Triunfo hasta Gran Vía, donde se ubicaba la sede de los sindicatos franquistas. Participaron casi doscientos trabajadores. Junto a ellos caminaron algunos universitarios pertenecientes al Sindicato Democrático de Estudiantes de Granada (SDEUD). Fue precisamente con ayuda de aquellos universitarios próximos al comunismo como nació ‘Nuestra Lucha’.
Pero, en general, era un movimiento obrero auspiciado por CC OO de poca potencia en la provincia.
Huelga de 1970
Los ánimos de los trabajadores estaban revueltos para 1970. Si Mayo de 1968 cogió desprevenidos a estudiantes y obreros granadinos, en la primavera de 1970 ya comenzaba a circular una propuesta de convenio colectivo de la construcción. La patronal no quería ni oír hablar de ello. Fueron precisamente los redactores de ‘Nuestra Lucha’ quienes imprimieron octavillas explicando las condiciones. Hubo alguna detención por ello en Semana Santa, pero el tema no quedó larvado.
Los obreros permanecían a la puerta de Sindicatos en espera de saber lo que decidía la asamblea, vigilados por la Policía. Momentos después, los tres obreros de abajo resultaron asesinados por disparos policiales.
Para el 21 de julio de 1970 fue convocada una asamblea en el edificio sindical. Varios miles de trabajadores pararon las obras y se acercaron a la Avenida Calvo Sotelo a esperar acontecimientos. Lo que sucedió después ya lo conocemos: la brigada político-social estaba mezclada en la asamblea, veía que aquella concentración podía desembocar en una gran manifestación. La solución fue llamar a la Policía Armada para que disolviera a los concentrados. Los disparos acabaron con la vida de Antonio Cristóbal Ibáñez Encinas, Manuel Sánchez Mesa y Antonio Huertas Remigio tal día como hoy de hace 45 años. Hubo varias decenas de heridos.
Los empresarios tomaron represalias despidiendo a muchos de sus trabajadores, principalmente a quienes habían osado hacer huelga y asistir a la asamblea
Los empresarios tomaron represalias despidiendo a muchos de sus trabajadores, principalmente a quienes habían osado hacer huelga y asistir a la asamblea. Otros trabajadores se encerraron en la Catedral de Granada durante ocho días, con el apoyo inequívoco del arzobispo Benavent Escuín, quien calificó de salvajada la represión policial sin ningún motivo de peso. Lo ocurrido en Granada dio la vuelta a España de boca en oído; y al mundo. Aquella huelga de 1970 fue la primera durante tres décadas de franquismo en Granada. Los obreros consiguieron algunas mejoras laborales (175 pesetas de jornal mínimo, jornada laboral de 48 horas, et.) Pero a nivel político y sindical, al tardofranquismo hizo uso de su puño de hierro todavía durante unos cuantos años más (en 1976 seguían las redadas policiales por mantener asambleas de trabajadores).
Uno de los homenajes a los tres obreros asesinados, en el monumento en Caleta. M.R.
‘Nuestra Lucha’ continuó unos números más en la clandestinidad para poder contar la realidad a los granadinos que deseaban escucharla.
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