El Ayuntamiento de Loja ha soltado este miércoles más de 120 kilos de trucha arcoíris en Riofrío, en cuyo coto intensivo de pesca ya se puede practicar esta actividad después de que el Congreso de los Diputados aprobara este pasado junio la modificación de la Ley de Patrimonio Natural y de la Biodiversidad, que antes promovía la erradicación de esta especie, considerada como invasora.

Según ha informado el alcalde de Loja, Joaquín Camacho (PP), a Europa Press, más de cien personas han asistido a esta suelta controlada de la trucha arcoíris, que vuelve de este modo a los ríos Frío y Salado de la pedanía lojeña.

Las solicitudes presentadas para practicar la pesca deportiva en el coto delimitado en la localidad hacen prever que el sábado esté lleno, y el domingo a más del 80 por ciento de su capacidad.

Tras la suelta, ha habido una "grandísima fiesta de recepción" de la trucha a la que han asistido el alcalde pedáneo de Riofrío, Alejandro Aguilera, y miembros de asociaciones de vecinos y de hosteleros, en un día que ha sido "muy esperado" por todos en Loja, ha explicado Joaquín Camacho.

La jornada en Ríofrío ha transcurrido con temperaturas que son agradables en pleno verano --con "menos calor que en Loja y en Granada"--, lo que se suma, según el alcalde lojeño, al "atractivo" de la zona, una vez que las truchas arcoíris "vuelven a navegar" por el río.

El Congreso de los Diputados aprobó a finales del pasado mes de junio la modificación de la Ley de Patrimonio Natural y de la Biodiversidad por la que se amnistió a algunas especies invasoras como la trucha arcoiris, el cangrejo rojo o el arruí, que ya no serán erradicadas sino que se pueden volver a pescar o cazar.

La iniciativa reforma la Ley de Patrimonio Natural y Biodiversidad, que incluye a estas y otras especies en el Catálogo de Especies Invasoras, tras la sentencia dictada en 2016 por el Tribunal Supremo que señalaba que debían seguir en este catálogo y, por tanto, "ser erradicadas por su potencial invasor".