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Lorenzo del Río, en una reunión con el vicepresidente de la Junta, Juan Marín, hoy en el TSJA. junta granada

El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), Lorenzo del Río, ha opinado este miércoles que la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal que ha reducido los plazos de instrucción ha sido un "cambio arriesgado" que en algunos casos está produciendo "distorsiones procesales" y "merece una reflexión del legislador".

Lorenzo del Río, que se ha reunido en la sede del TSJA, en Granada, con el vicepresidente de la Junta, Juan Marín, se ha pronunciado de este modo a preguntas de los periodistas después de que la Unión Progresista de Fiscales haya reclamado que se derogue este cambio en los plazos de instrucción y de que en Granada se haya archivado la investigación sobre supuestos fraudes en las contrataciones de la Alhambra a raíz de que la complejidad de la causa se dictara fuerza de plazo.

El presidente del TSJA ha incidido en que este es "un tema del legislador, que debe ser quien lo aborde", aunque ha reconocido que el asunto merece una reflexión pues implica estar con una "premura de tiempo enorme en causas complejas".

Seis meses, según ha sostenido, puede ser un espacio de tiempo "muy corto" en determinados asuntos y se pueden producir hechos que "afecten al servicio público y a la imagen" de la Justicia.

Pese a ello ha opinado que en otras causas complejas, como el llamado 'caso Nazarí' que se investiga en Granada sobre una supuesta trama de corrupción urbanística y que lleva varias años en fase de instrucción, no tiene por qué ocurrir lo mismo, pues la ley permite prórrogas.

Aunque ha considerado "básico" el que haya una justicia en un plazo razonable, ha recalcado que hay casos complejos en los que los jueces requieren de una ayuda externa "enorme" y están pendientes de actuaciones policiales, peritajes y tasaciones que si se dilatan en el tiempo también prolongan el proceso de instrucción.