Policías nacionales evitan que una mujer de 73 años se tire al vacío desde un muro de ocho metros en el Zaidín

Ciudadanía - IndeGranada - Miércoles, 11 de Marzo de 2020
Los agentes averiguaron después que la mujer vivía sola y no tenía familiares cercanos.
policía nacional/archivo
Los agentes averiguaron después que la mujer vivía sola y no tenía familiares cercanos.

Agentes de la Policía Nacional de Granada consiguieron evitar hace unos días que una señora se precipitase al vacío arrojándose desde un muro a unos ocho metros de altura tras una discusión vecinal en el barrio del Zaidín, según informa la Policía en una nota de prensa.

Según explica la nota, agentes del Grupo de Atención al Ciudadano fueron reclamados hasta una vivienda del Zaidín donde unas vecinas habían entablado una discusión. Una vez en el lugar contactaron con una de las partes, una señora de unos 70 años, quien les comunicó que su vecina la estaba molestando, sin concretar de quién se trataba.

La señora mostraba un estado de gran nerviosismo, por lo que los agentes intentaron tranquilizarla mientras trataban de localizar entre los vecinos a testigos de lo sucedido.

La mujer se dirigió hasta un muro ubicado en las cercanías a una altura de unos ocho metros desde el suelo sobre el que se sentó llorando y manifestando una clara intención de precipitarse al vacío.

Los policías actuaron con premura dado el alto riesgo existente de que esta señora se precipitara desde esa altura y llevaron a cabo una maniobra sorpresiva durante la que lograron distraerla durante unos instantes, lo que permitió que pudieran separarla del muro en cuestión. Durante la maniobra cogieron a la señora por los hombros y la respuesta de la misma fue intentar morderles mientras les gritaba que la dejasen hacer su voluntad. Una vez retirada del lugar de peligro, solicitaron la presencia de una ambulancia del 061 que la trasladó hasta un centro hospitalario donde recibió asistencia sanitaria.

Durante el tiempo de espera hasta la llegada de la asistencia los policías consiguieron tranquilizarla y averiguaron que la señora, de 73 años, residía  sola en la ciudad y carecía de familiares cercanos.