La Junta cierra las instrucciones del próximo curso sin atender las demandas de la comunidad educativa
Imagen de archivo del IES Zaidín-Vergeles de la capital. indegranada
Lo que era un borrador se ha convertido ya en unas instrucciones a todos los efectos que deberán seguir los centros educativos el próximo curso. La Consejería de Educación y Deporte las ha remitido a los equipos docentes sin cambios y, por tanto, sin atender a las principales demandas de la comunidad educativa.
Las medidas de refuerzo, desdobles de grupos y agrupamientos flexibles para dar respuesta al alumnado que se recogen en estas instrucciones están condicionadas a la disponibilidad de recursos materiales y humanos.
Pero la Junta sigue sin aclarar con qué recursos extraordinarios contarán los centros. Si son los mismos que los de este curso, implica que se pide un doble esfuerzo a los docentes y equipos directivos, porque se les está reclamando que planifiquen el próximo curso para afrontar distintos escenarios, esto es, que se puedan seguir las clases de manera presencial o que esto no sea posible.
Y todo ello aumentando la carga burocrática, con un calendario de reuniones semanales y quincenales con precisas indicaciones, además de la necesidad de actualizar el plan de centro y establecer un plan de actuación digital.
De lo que no hay rastro es de que se vaya a reducir la ratio. La Junta de Andalucía ha dejado claro que no entraba en sus planes. El portavoz del Gobierno andaluz, Elías Bendodo, llegó a alegar motivos económicos para justificarlo y dijo que reducir la ratio a 15 alumnos por aula costaría mil millones.
Reincorporación del personal docente
Por otra parte, la Junta tenía previsto también enviar este pasado martes a los centros las instrucciones para la reincorporación del personal docente una vez que finalice el curso. Según la viceconsejera de Educación y Deporte, Carmen Castillo, estas órdenes prevén que "se faciliten jornadas flexibles y turnos, siempre que se posible, y que haya una asistencia escalonada", aunque establecen que se mantendrán de forma telemática las tareas que no requieran para su realización de la presencia en los centros.
En un audio remitido a los periodistas, Castillo señaló que tras finalizar el régimen ordinario de clases "lo que procede" es llevar a cabo todas esas tareas que son habituales a la finalización del curso escolar como "las sesiones de evaluación, las garantías procedimentales de las mismas, la recogida de los libros de texto del programa de gratuidad, la cumplimentación de la documentación administrativa o la atención a los miembros de la comunidad educativa que lo soliciten".
"Y fundamentalmente -continuó- la coordinación docente, que este año es especialmente relevante de cara a la preparación del próximo curso escolar con las instrucciones que se dictaron ayer mismo en relación con la superación del posible desfase curricular que se haya podido producir por parte del alumnado que ha podido desconectares en el periodo de docencia no presencial".
De este modo, Castillo explicó que en las instrucciones se establece que se desarrollarán de manera telemática las funciones y tareas que no requieran para su realización la presencia del personal docente en los centros educativos, y que la jefatura de estudios preparará la planificación de estas actividades y tareas que sí requieren de esa presencialidad, de manera que "se faciliten jornadas flexibles y turnos, siempre que sea posible, y que haya una asistencia escalonada, y que, con carácter general, se respeten todas la condiciones de seguridad que sean precisas".
En este sentido, recordó que se empezarán a hacer los test a los profesionales que trabajan en el sistema educativo "de una manera escalonada, empezando con aquellos que participarán en el programa de refuerzo estival que empieza en julio, para los que van a participar en las pruebas de acceso a la universidad o para el que va a trabajar en las pruebas de titulación de la ESO y Bachillerato, que también se celebran a finales de este mes".
Además, estas instrucciones, de aplicación a todos los docentes de los centros públicos de titularidad de la Junta de Andalucía, señalan que "no se incorporará aquel personal que, a fecha de las mismas, se encuentre entre el grupo de personal especialmente sensible recogido en la medida quinta del Acuerdo de la Mesa General de Negociación común del personal funcionario, estatutario y laboral de la Administración de la Junta de Andalucía, que aprueba el plan de incorporación progresiva de la actividad presencial de la Administración de la Junta de Andalucía ratificado por el Consejo de Gobierno el 18 de mayo de 2020".
Asimismo, y sobre el segundo curso de Bachillerato y segundo curso de Bachillerato para personas adultas, durante los días que comprende desde la finalización del régimen ordinario de clases en este curso hasta el final del curso académico, el próximo 30 de junio, los docentes, entre otras, llevarán a cabo "tutoría, de forma telemática, del alumnado que ha obtenido el título de bachiller, encaminada a la preparación para el acceso a las enseñanzas que constituyen la educación superior".También la asistencia a las sesiones de los correspondientes departamentos didácticos que tengan que resolver reclamaciones a las calificaciones de las materias o de titulación.
En este caso, la instrucción precisa que para garantizar la participación de las personas en situación de vulnerabilidad, "las sesiones, en cumplimiento de los estipulado en el artículo 17 ,Ley 40/2015, de 1 de octubre de Régimen Jurídico del Sector Público, se podrán celebrar con la participación telemática de los miembros que no pudieran hacerlo físicamente".
Por último, indican que la "Inspección de Educación asesorará a los centros sobre todos los aspectos recogidos en la presente instrucción, y velará por el cumplimiento de la misma" y que esta "será de aplicación hasta la finalización del presente año escolar 2019/2020".
Los sindicatos piden indicaciones "lo más claras posibles" para la reincorporación de los docentes. europa press
Los sindicatos integrantes de la Mesa Sectorial de Educación exigen que "sean lo más claras posibles, de manera que no puedan ser objeto de lecturas arbitrarias" sobre la presencialidad de los docentes y que "se garanticen" las medidas higiénico sanitarias que deben cumplirse, según informa Europa Press.
Así, en un comunicado, CSIF Andalucía defiende que la incorporación del personal docente a los centros educativos se realice con "garantías" de seguridad sanitaria y de forma flexible y escalonada, para atender tareas que requieran de la presencia "ineludible" del profesorado, y como apoyo a los equipos directivos, que "actualmente soportan una importante sobrecarga".
La presidenta de CSIF Educación Andalucía, Elena García, señala que la central sindical se opondría a una vuelta generalizada del profesorado una vez que concluya el periodo lectivo a los centros educativos, pero sí es partidaria del regreso presencial del personal docente que sea "estrictamente necesario para atender determinadas cuestiones inaplazables y urgentes", preservando siempre a los colectivos vulnerables y a los profesionales que tengan personas dependientes y menores de 14 años a su cargo, según explica.
El sindicato exige instrucciones "recojan de manera explícita las medidas higiénico sanitarias precisas que deben cumplirse, y que no están reflejadas en el borrador" y solicita que "sean lo más claras posibles, de manera que no puedan ser objeto de lecturas arbitrarias, sobre todo en lo que se refiere a las actividades para las que se requiere presencialidad y aquellas que pueden desarrollarse a distancia", señala García.
FeSP UGT Andalucía defiende en una nota de prensa la presencialidad voluntaria del profesorado en los centros educativos una vez que finalice el estado de alarma, por lo se muestran en "desacuerdo" con las instrucciones en este sentido porque "aluden a que dicha presencialidad queda al arbitrio del director del centro".
"Creemos que los claustros y reuniones de fin de curso y el resto de actividades no lectivas habituales en estas fechas se pueden llevar a cabo sin necesidad de acudir a los centros educativos", así que "no entendemos la imposición de la presencialidad que supone mover a más de 100.000 docentes en Andalucía", aseguran.
Desde CCOO Enseñanza señalan que lo ordinario debe ser la teleformación y que la presencialidad "debe ser solo extraordinaria", toda vez que piden que "no debe incorporarse presencialmente el personal vulnerable o con problemas de conciliación" y apuntan que la responsabilidad sanitaria "no puede recaer una vez más en las direcciones de los centros".
CCOO apunta que estas instrucciones "no son garantistas" y resultan "incomprensibles" para la última semana de junio. "Menos postureo y más reducción de ratio y autorización de nuevos grupos", afirma el sindicato, que solicita "más responsabilidad" a la Consejería de Educación y le exige "una redacción clara" sobre la presencialidad extraordinaria.
Desde ANPE defienden que esta instrucción "sea complementada" por un protocolo detallado de las medidas sanitarias que tengan que acometer los centros y que estos "sean dotados del material necesario para ello".
Además, valora que establezca la realización por vía telemática de todas aquellas tareas que no requieran una presencia física del profesorado y clarifique que la función del profesorado de segundo curso de Bachillerato respecto a su alumnado "se limitará a la atención de tutorías, preferentemente por vía telemática".
Saluda que este regreso presencial del profesorado a los centros, "tras más de tres meses de teletrabajo forzoso, no se produzca hasta la finalización del periodo lectivo, a diferencia de lo ocurrido en otras comunidades autónomas", porque entiende que de esta manera "se ha preservado mejor la salud de los docentes y del resto de integrantes de la comunidad educativa".