Andalucía ha pasado en 5 años de ser de las autonomías que menos privatizaban la sanidad a estar entre las que más
Andalucía es la cuarta comunidad autónoma con mayor grado de privatización sanitaria, sólo superada por Madrid, Baleares y Cataluña, según refleja el informe 'La Privatización Sanitaria en las Comunidades Autónomas 2024', publicado este miércoles por la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP).
El informe, realizado con datos del año 2023, destaca que la privatización ha aumentado en todas las comunidades autónomas. El documento, consultado por El Independiente de Granada, contiene una serie de criterios que sitúa Madrid, con 28 puntos, como la región con mayor privatización sanitaria de España, seguida de Baleares (27), Cataluña (26) y Andalucía (25).
Dentro de estas variables, se han evaluado aspectos de aseguramiento, financiación privada (en seguros sanitarios y gasto de bolsillo), recursos y utilización del sector privado y porcentaje de gasto sanitario público dedicado directamente a contratación con los centros privados, así como la existencia de fórmulas de colaboración público-privadas establecidas en la comunidad autónoma. Sólo se han utilizado datos que se encuentran publicados y en las fuentes disponibles: Ministerio de Sanidad (MS), Instituto Nacional de Estadística, Barómetro Sanitario, IDIS.
Con un grado intermedio de privatización sanitaria se encuentra Aragón (24), Comunidad Valenciana (24), Asturias (23), Canarias (23), Murcia (22), Castilla y León (21), Cantabria (20), Galicia (20), País Vasco (19), La Rioja (19).
En 2019, según la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública, Andalucía era la tercera con la privatización sanitaria más reducida, solo por detrás de Extremadura (la que menos) y Castilla la Macha.
Cinco años antes, en 2014 figuraba como la quinta con el grado de privatización más bajo, por detrás de Asturias, La Rioja, Castilla la Mancha y Extremadura (la más baja).
En estos cinco años, según los informes, Andalucía pasó en 2020 al grupo medio de comunidades con privatizaciones sanitarias, lo que mantuvo en 2022 y 2023, pero cada vez con más grado de privatización, hasta el último informe que se sitúa en el grupo de comunidades con más privatización de lasa sanidad pública.
El portavoz de la FADSP, Marciano Sánchez-Bayle, fue el encargado de presentar los datos en una rueda de prensa en la que ha hecho hincapié en que "la privatización del sistema sanitario es un gran problema de la sanidad pública", ya que "incrementa los costes de manera muy importante y mercantiliza un derecho fundamental de las personas, que es uno de los pilares clave del Estado del Bienestar".
"Cuanto más dinero público se deriva para financiar al sector privado, menos dinero existe para financiar al sistema público. Cuanto menos presupuesto tienen los centros públicos, menos capacidad tienen de atender la demanda, y cuanta menos capacidad tienen de atender la demanda, más se necesita acudir al sector privado", ha matizado el portavoz de la FADSP.
Dentro de las regiones con menor grado de privatización, se sitúa Castilla-La Mancha (18), Extremadura (16) y Navarra (16). En este grupo sólo se mantiene Extremadura en todos los informes, que hace dos años dejó de ser la comunidad autónoma con menor grado de privatización.
Los movimientos más llamativos en cuanto a mayor privatización entre los dos últimos informes, además de Andalucía, son el de Cantabria que aumenta 6 puestos, Murcia y Aragón que aumentan 4, Asturias 3, Valencia que aumentan 2 y Baleares y País Vasco que aumentan 1.
Además, Navarra baja 12 puestos (el año anterior había aumentado 8), Galicia 5, Canarias 4, La Rioja 2, y Cataluña 1. Solo 3 CCAA mantienen la misma posición que en 2023 (Madrid a la cabeza y Castilla - La Mancha y Extremadura en las últimas posiciones).