Torres Hurtado no se va
Tal día como hoy de hace un año al alcalde de Granada le dio un jamacuco cerebral que le mantuvo alejado del escenario político durante un tiempo. Pocos pensaban que volvería a la primera línea. Pero lo hizo progresivamente y con todas sus facultades, pocas o muchas, pero las de siempre. Ahora, un año después, se ha sentado en la sala de Comisiones del Ayuntamiento para hacer una demostración de fuerza y de forma. Junto al equipo de gobierno saliente, incluido Sebastián Pérez, que también podría ser entrante, ha convocado a los medios para contar su versión de la llamada que le hizo el domingo Luis Salvador, líder de Ciudadanos y crupier de la timba en la que se ha convertido la negociación entre los partidos para alcanzar la alcaldía. Salvador, justamente crecido por los resultados electorales de su partido, sabiéndose poseedor de la llave de la gobernación municipal y muy cabreado con el PP, le exigió a Torres Hurtado que se disculpara públicamente por la campaña sucia que le montaron unos días antes de las votaciones, como paso previo para sentarse a negociar el gobierno de la ciudad. Torres Hurtado, consciente de que el que se va a Sevilla pierde la silla, emitió un tibio comunicado pidiendo disculpas. Argumentaba el alcaldable que no tenía problema en pedir disculpas si con ello se propiciaba abrir una vía de negociación con el partido naranja por el “bien de la ciudad”.
El crupier de C´s, unos días después, volvió a tensar la cuerda de una posible negociación al pedir que la concejala de Movilidad, Telesfora Ruiz, no repitiera en el Área y que desde la alcaldía se renunciara a gobernar por decreto y por tanto que todos los asuntos pasaran y se aprobaran en Pleno. En ese momento algunos temimos por la salud de Torres Hurtado. Esos sustos alteran el pulso. El PP y el alcalde un funciones dijeron públicamente que no aceptarían esos puntos, aunque a Telesfora se le empezó a buscar nuevo destino, concretamente en el Área de Personal. Cuando todo parecía propicio para un acercamiento a la mesa de negociación entre los unos y los otros, el candidato de C`s vuelve a la carga y eleva aún más el nivel de sus exigencias al pedir definitivamente que para dejar gobernar al PP primero debe retirarse Torres Hurtado como alcaldable. Fue un bombazo. Un ataque a la línea de flotación del partido. Con esta nueva exigencia ya sí que temimos definitivamente por la salud de Torres Hurtado. Por suerte, y a Dios gracias, no ha sido así. Ya goza de una salud de Hierro. Hoy, el alcaldable Popular ha comparecido ante los medios en mangas de camisa, jovial, rodeado de su equipo, para dar un golpe de efecto y decir que no se va de ninguna manera y que en caso de que prospere el cuatripartito de los partidos anti-sistema, radicalizados, incluido el PSOE, él irá a la oposición, donde dice también sabe estar. Sebastián Pérez le apoya, o eso dice públicamente. Y Juan García Montero le ha hecho la ola.
A partir de hoy habrá que estar atentos a Paco Cuenca, ya que Salvador le ha puesto las cartas en su mesa para empezar a jugar. O la zanahoria. Para antes del día 13 tiene que estar resuelta la timba. ¿Se está abriendo una nueva forma de hacer política?