Jesús Yoldi Bereau, profesor de la Universidad, intelectual y alcalde
Nacido en Arizkun (Navarra) el 4 de diciembre de 1894, se licenció en Ciencias Químicas, con sobresaliente, en la Universidad de Zaragoza en 1915 y con 23 años ya era doctor.
Antes de recalar en Granada trabajó como profesor encargado del curso práctico de Química General en la institución académica de Zaragoza y, posteriormente, en la de Sevilla, como profesor Auxiliar interino de Química Inorgánica en la Facultad de Ciencias.
Tal era ya su celebridad que Jesús Yoldi Bereau pronunció el discurso de apertura del curso académico 1929-30, en la Universidad de Granada, sobre El elemento químico: su evolución y concepto actual, en el que pone de manifiesto su profundo conocimiento de los últimos avances registrados en Química durante el primer cuarto del siglo XX
En 1922 obtuvo la cátedra de Química General de la Facultad de Medicina de Cádiz, entonces perteneciente a la Universidad de Sevilla.
En 1924 se incorpora a la Universidad de Granada como catedrático de Química General de la Facultad de Ciencias por traslado desde la Universidad de Sevilla y tras la jubilación de su titular José Alonso Fernández, un año antes.
Tal era ya su celebridad que Jesús Yoldi Bereau pronunció el discurso de apertura del curso académico 1929-30, en la Universidad de Granada, sobre El elemento químico: su evolución y concepto actual, en el que pone de manifiesto su profundo conocimiento de los últimos avances registrados en Química durante el primer cuarto del siglo XX.
Al cabo de unos años en Granada, Jesús Yoldi se casó en 1928 con Beatriz Pérez Pérez, natural de Capileira, con quien tuvo tres hijos: Jesús, Antonio Luis y Victoriano.
De sus años de docente quedan nombres de catedráticos que evocan el respeto y la admiración de quienes disfrutaron de su magisterio por su entrega y dedicación, y por sus destacadas aptitudes pedagógicas. De hecho, el número del alumnado de Químicas subió considerablemente y son reconocidos sus viajes de estudios a industrias químicas, inéditos hasta entonces.
De hecho, en el Archivo Histórico de la Universidad de Granada se conserva muy poca información -la carpeta de su expediente académico está vacía- y prácticamente nada en el Ayuntamiento de Granada del que fue alcalde, ni siquiera una imagen ni retrato.
Marie Curie, premio Nobel de Física y premio Nobel de Química, visitó Granada en abril de 1931aunque no quede constancia de ello en el Boletín de la Universidad, la prensa local, en concreto El Defensor de Granada, sí se hizo eco de la estancia, recogida también por diarios de tirada nacional.
Como informaba El Defensor de Granada, en la comitiva que recibió a Madame Curie figuraba el profesor Yoldi, pero más bien como concejal del Ayuntamiento, que resultó elegida tras las elecciones municipales de 12 de abril de 1931, y que dieron lugar dos días después a la proclamación de la II República Española. Madame Curie, en varias cartas dirigidas a su hija Irene, dejó constancia de su simpatía por la forma en que se había producido ese cambio político.
Antes, recibe también a Pieter Zeeman, premio Nobel de Física en 1902, y su esposa, junto a los profesores Gallas y Tercedo.
En el curso 1931-1932 forma parte del Personal Directivo de la Universidad de Granada como miembro del Consejo del Patronato y es miembro de la Junta de Gobierno.
El profesor Yoldi mantuvo una vida pública muy destacada, no sólo como catedrático universitario o por su participación en la política local, sino también por su implicación en eventos culturales y artísticos. Un ejemplo ilustrativo es su presencia en el estreno de la obra Mariana Pineda de Federico García Lorca en mayo de 1929, de lo que hay constancia por una fotografía en la que Yoldi se encuentra junto al ilustre autor de la obra entre otras personalidades y figuras de la cultura y la política.
El profesor Yoldi fue uno de los ocho claustrales que, en la Sesión de Claustro de 7 de abril de 1936, votó la propuesta de moción de censura contra el rector Antonio Marín Ocete y la Junta de Gobierno, debido al cierre de la universidad y a las medidas represivas que se tomaron por parte de las autoridades académicas en relación con los continuos conflictos estudiantiles
De sus encuentros y tertulias con amigos universitarios, sabemos que solía reunirse con frecuencia con algunos de sus colegas, como los catedráticos Salvador Vila Hernández, Alejandro Otero Fernández (ambos fueron Rectores de la Universidad de Granada durante la República) y Adolfo Rancaño Rodríguez, primer catedrático de Química Física de la Universidad de Granada, entre otros.
Jesús Yoldi, siempre comprometido, fue crítico con decisiones de las autoridades académicas en los difíciles tiempos posteriores al triunfo del Frente Popular en febrero de 1936. Así, el profesor Yoldi fue uno de los ocho claustrales que, en la Sesión de Claustro de 7 de abril de 1936, votó la propuesta de moción de censura contra el rector Antonio Marín Ocete y la Junta de Gobierno, debido al cierre de la universidad y a las medidas represivas que se tomaron por parte de las autoridades académicas en relación con los continuos conflictos estudiantiles. Cinco de los claustrales que votaron dicha propuesta, incluyendo al propio Jesús Yoldi, serían luego fusilados y, de hecho, aparecen con una cruz en el acta de dicha sesión.
Implicado en la vida política de Granada
El profesor Yoldi formaba parte de ese nutrido grupo de profesores universitarios e intelectuales que fueron tomando conciencia de la necesidad de intervenir en la actividad pública para sacar a Granada y provincia del secular atraso que venía arrastrando.
Como expresión de su compromiso con la ciudad de Granada y con el proyecto renovador que representó la II República Española, Jesús Yoldi Bereau, que había sido miembro del Partido Republicano Autónomo de Granada, se integró ya en 1934 como miembro activo de Izquierda Republicana, partido liderado por Manuel Azaña y que agrupaba a un buen número de intelectuales republicanos, tras pasar por Acción Republicana.
Aceptó el encargo de ser alcalde de Granada, el 27 de abril de 1932, en cuyo Ayuntamiento había sido ya concejal tras la instauración de la República. En los menos de cinco meses que estuvo en el cargo, hasta 30 de septiembre de 1932, desarrolló medidas tales como bajar el precio de la harina (no logró que bajara también el precio del pan), inaugurar la placa homenaje al rey Alhamar junto a la puerta de las Granadas en la Alhambra (todavía se encuentra en ese lugar) en presencia del Jalifa Muley Hassan y del poeta Villaespesa, poner en marcha una línea de autobuses entre Málaga y Sierra Nevada, nombrar a los representantes de la ciudad en la Asamblea de Córdoba, que iba a discutir el Estatuto de Autonomía de Andalucía, retirar la subvención que el Ayuntamiento tenía asignada al periódico Ideal y defender de forma decidida la legalidad republicana ante la sublevación del General Sanjurjo en el verano de 1932.
El trágico final
En julio de 1936, Jesús Yoldi es detenido por falangistas y miembros de la Guardia Civil que apoyaban a los militares golpistas cuando se encontraba de vacaciones en Capileira, el pueblo natal de su esposa. Tras el arresto, es conducido a la calle Duquesa y desde allí pasa a la cárcel para ser llevado luego a Víznar, a La Colonia.
Jesús Yoldi fue obligado, junto con Joaquín García Labella, catedrático de Derecho Administrativo que también sería posteriormente fusilado, a cavar las fosas y a enterrar en el barranco de Víznar a los que habían sido sus amigos y compañeros leales al Gobierno de la II República Española.
Jesús Yoldi fue obligado, junto con Joaquín García Labella, catedrático de Derecho Administrativo que también sería posteriormente fusilado, a cavar las fosas y a enterrar en el barranco de Víznar a los que habían sido sus amigos y compañeros leales al Gobierno de la II República Española, primeras víctimas de la represión. Algunos testimonios recogidos por el investigador Agustín Penón en 1955, el grupo en el que estaba Jesús Yoldi enterró a Federico García Lorca cuando éste fue fusilado en agosto del 1936.
Dos meses después, el 23 de octubre de 1936, Jesús Yoldi Bereau era fusilado, sin juicio previo alguno, contra las tapias del cementerio de San José, el mismo día en el que también fue fusilado Salvador Vila, rector de la Universidad de Granada, destituido el 18 de julio de 1936.
Partida de defunción de Jesús Yoldi.
El cuerpo de Jesús Yoldi fue enterrado en el cementerio de Granada, aunque desde 1970 descansa, junto al de su esposa y el de su hijo Victoriano, en el cementerio de Capileira en la Alpujarra granadina.
El 28 de noviembre de 1936 el nuevo Rector de la Universidad de Granada, Antonio Marín Ocete, el mismo contra quien Yoldi había votado una moción de censura, “comunica a la Junta Técnica que (don Jesús Yoldi Bereau) no se presentó a su destino”.
Fotografías de Jesús Yoldi: vía ugr.es (http://secretariageneral.ugr.es/pages/tablon/*/noticias-canal-ugr/recupe...)
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Para que nunca se olvide. Para que nunca se repita.
En colaboración con y las asociaciones memorialistas de la provincia de Granada.