La parlamentaria andaluza Olga Manzano ha instado a la Junta de Andalucía a solucionar el “déficit” de PTIS (personal técnico de integración social) que aún existe en los centros educativos de la provincia más de un mes después del inicio del curso escolar, así como a mejorar las condiciones laborales de las más de 200 personas que se dedican a ello en la provincia.

“Instamos a que solucionen ya el problema, antes de que las jornadas puntuales de huelga que han convocado se conviertan en indefinida por las nefastas consecuencias que puede tener para el alumnado con estas necesidades”, ha señalado Manzano que ha mostrado su apoyo a las y los profesionales en esta lucha.

La socialista ha cuestionado el compromiso del PP en este ámbito, ya que, entre otros ejemplos, uno de los últimos movimientos que ha realizado ha sido reducirle de un día para otro las horas al PTIS del CEIP Besana de Ventorros de San José, pasando de 25 a 10 horas a la semana.

“Esa no es forma de garantizar una educación pública de calidad e inclusiva. La Junta debe tomar nota de la manifestación convocada por FAMPA Alhambra hace algo más de una semana y a la que asistieron 5.000 personas para entre otras cuestiones reclamar un apoyo nítido y sincero que acabe ya con las condiciones que sufren las y los profesionales y el alumnado con necesidades específicas”, ha subrayado.

Así, ha incidido en que Moreno Bonilla “tiene que atender ese clamor y rectificar donde sea necesario para ampliar horarios de forma rigurosa y atajar la precariedad laboral que sufre el personal vigilando, además, que se cumplan las condiciones firmadas en el contrato con las empresas prestatarias del servicio”.

“El personal técnico de integración social es esencial para que a los niños y niñas con necesidades específicas de apoyo educativo no se le vulnere su derecho a la educación en condiciones de igualdad con el resto de alumnado”, ha remarcado. 

La parlamentaria andaluza ha afirmado que “hace más de un mes, coincidiendo con el inicio de curso, denunciamos que hasta 94 centros habían solicitado ampliación horaria o una nueva figura de PTIS para cubrir las necesidades de este alumnado y la situación, lamentablemente, no ha cambiado mucho”.

Jornadas "sangrantes"

En ese contexto, ha recordado que la media de jornada de las y los PTIS ronda las 21 horas semanales siendo “sangrantes” las jornadas de 10 horas --2 horas al día--, y que el 80 por ciento estén contratados por una jornada inferior a la jornada lectiva.

“Como consecuencia de esta jornada parcial es evidente que cualquier alumno o alumna que precisa atención y acompañamiento en actividades de la vida diaria como puede ser cambio de pañales, uso del inodoro, botella urinaria o cuña, algo que no es posible de predecir, se queda sin atender en las horas que no tiene PTIS”, ha apuntado.

Perjudicado también es el alumnado con enfermedades crónicas como diabetes que precisa del control de insulina o administración de la misma, una tarea que en ausencia de este personal tiene que ser realizada por un maestro o profesor que, a su vez, tiene que dejar de realizar sus funciones.

Además, según ha detallado Manzano, hay circunstancias que “no se pueden predecir como es la atención a las y los escolares que padecen crisis epilépticas o tienen conductas agresivas o autolesivas. ¿Qué pasa con ellos si las y los PTIS no están contratados a jornada lectiva completa?”.