Campaña contra la violencia digital
La Consejería de Salud gastará unos 50 millones anuales, a pesar de las deficiencias en la prestación sanitaria

La Junta pagará el complemento de exclusividad a los médicos de la sanidad pública que también trabajan en la privada

Ciudadanía - IndeGranada - Domingo, 7 de Julio de 2019
A pesar de las evidentes carencias en la atención sanitaria, la Junta de Andalucía aplicará una controvertida medida, de la que te informamos.

Entrada al Hospital del Campus. P.V.M.

A la vuelta del verano los médicos que compatibilizan su trabajo en la sanidad pública con la privada, también cobrarán en sus nóminas el complemento de exclusividad que solo percibían los profesionales sanitarios que se dedicaban en exclusiva a su labor en el Servicio Andaluz de Salud.

La controvertida medida, que oscila entre 700 y 1.000 euros más al mes, supondrá un coste adicional para la Consejería de Salud de unos 50 millones de euros, a pesar de las deficiencias que aún mantiene la atención sanitaria pública andaluza en todos los niveles, especialmente, en la atención primaria, donde en Granada cerrarán consultorios en verano por  la resistencia de la Junta a contratar a médicos que los atienda

La controvertida medida, que oscila entre 700 y 1.000 euros más al mes, supondrá un coste adicional para la Consejería de Salud de unos 50 millones de euros, a pesar de las deficiencias que aún mantiene la atención sanitaria pública andaluza en todos los niveles, especialmente, en la atención primaria, donde en Granada cerrarán consultorios en verano por la resistencia de la Junta a contratar a médicos que los atienda.

El aumento de sueldo para los médicos  de la pública que también trabajan en la sanidad privada es una medida que figuraba en el programa electoral del PP, y también en el acuerdo programático suscrito por los populares y Ciudadanos, cuando firmaron el acuerdo programático en el Gobierno andaluz.

Y una histórica reivindicación de los sindicatos médicos, que en la legislatura pasada, fue rechazada en el Parlamento andaluz, gracias a los votos del PSOE, que entonces gobernaba, Podemos e IU y con el apoyo del PP, que presentó la iniciativa y Ciudadanos.

El consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, ya lo anunció tras tomar posesión del cargo en su primera comparecencia en la comisión de Sanidad del Parlamento andaluz el pasado 13 de febrero, para presentar las líneas estratégicas de su departamento.

Entonces, además de defender la sanidad pública, universal, gratuita y de calidad – Antes de ser nombrada, el mismo PP al que pertenece le desautorizó por decir que la sanidad universal y gratuita era “una utopía”-, habló de la eliminación de la obligatoriedad de la exclusividad de los médicos que trabajan en la sanidad pública. Un anuncio que fue celebrado por este colectivo, algo más de 5.000 de los más de 23.000 que trabajan en la sanidad pública.

Cartel en el Centro de Salud de La Caleta.

Desde entonces, en comparecencias ante la prensa no se ha vuelto a referir a la medida, aunque si en foros privados, como en uno celebrado en Málaga, patrocinado por una empresa farmacéutica, y convocado por un diario local.

La intención de la Consejería es reemplazar el complemento de exclusividad por otro concepto retributivo, de igual importe, que percibirán todos los médicos que trabajan en la sanidad pública, con indiferencia de que también lo hagan en la privada. Supone de media unos 9.000 euros brutos al año. 50 millones de coste anuales.

Sólo Andalucía y Galicia mantienen el complemento de exclusividad. En la comunidad autónoma andaluza, la merma afecta a unos 5.000 profesionales del SAS. La medida supondría equiparar los ingresos de los facultativos que realizan la misma tarea, al margen de que desarrollen o no otra actividad vespertina. “Yo no sé cambiar ruedas. Cada uno por la tarde trabaja en lo que sabe”, comentó el consejero.

La intención de la Consejería es reemplazar el complemento de exclusividad por otro concepto retributivo, de igual importe, que percibirán todos los médicos que trabajan en la sanidad pública, con indiferencia de que también lo hagan en la privada. Supone de media unos 9.000 euros brutos al año. 50 millones de coste anuales.

Y aunque el consejero señaló que la medida se pondrá en marcha antes de que acabe la legislatura, esta semana el delegado de Salud y Familias en Málaga, Carlos Bautista, señaló que se aplicará en septiembre y elevó el coste de la medida a unos 50 millones de euros al año.

Bautista consideró que la medida supondrá que muchos médicos de la privada quieran volver al SAS. “La sanidad pública es la que da categoría, caché, y todo el mundo desea trabajar en ella si es con buenas condiciones”, aseguró Bautista ayer miércoles. A su juicio, la exclusividad “es discriminatoria y penaliza” a los médicos que cuando cumplen con su jornada en el SAS ejercen en la privada.

El gerente del SAS, Miguel Moreno Verdugo, sí se ha referido a la medida en las reuniones con profesionales sanitarios que ha mantenido en las provincias andaluzas, incluida Granada. En ellas, también advirtió a los profesionales sanitarios la obligación de cumplir a rajatablas los horarios.

En un reciente foro privado celebrado en Sevilla, el gerente del SAS afirmó que la Administración debe cuidar más y mejor a los profesionales. El Sindicato Médico Andaluz celebró las declaraciones y expresó su alegría por que sea intención de la gerencia del SAS cuidar a sus profesionales como objetivo principal de su gestión”, -si bien lo que debería ser el objetivo principal de la gestión del gerente y del consejero es la atención de calidad a los pacientes-.

La Federación de Empleados y Empleadas de los Servicios Públicos (FeSP) de UGT Andalucía ya manifestó su total desacuerdo con la medida al considerar que que existen otras prioridades "mucho más acuciantes" en el SAS como quitar listas de espera, aumento de plantilla, mejoras en la Atención Primaria e infraestructuras y tecnología sanitaria…

UGT consideró que le parecía “un dispendio que va contra el resto de trabajadores y trabajadoras que sí muestran su disposición a trabajar exclusivamente por y para la Sanidad Pública y es a estos profesionales a los que hay que premiar”.