La capital tendrá que aportar casi 15 millones de euros para sufragar el coste del transporte público este año
El servicio de autobuses urbanos en la capital costará al Ayuntamiento de Granada 14.917.731 euros este año. Esa será la aportación que deberá hacer el Consistorio para sufragar un servicio cuyo coste total ascenderá en 2018 a 33.104.088 euros. El resto se financia con la recaudación por viajeros (17.149.370 euros) y la aportación de organismos como el Consorcio Metropolitano de Transportes, por la línea 33 que llega a Cenes y los transbordos metropolitanos, o la UGR, por los bonobuses de los universitarios.
Así se recoge en el expediente con la estructura de costes del transporte público presentado por el equipo socialista para su aprobación en Junta de Gobierno Local. Se trata de un expediente que recoge las cuentas del área de Movilidad, fiscalizadas por la Intervención General, sobre el servicio y cuyos datos son los siguientes:
Concepto | 2018 | 2017 |
Previsión de kilómetros (Rober y Herederos Gómez) | 6.906.913 kms | 6.984.713 |
Coste total del servicio | 33.104.088 € | 35.747.373 € |
Beneficio industrial Rober | 2.522.944 €(incluido en coste total) | 2.476.723 € |
Aportación Metro (déficit tarifario) | 504.622 € | |
Previsión recaudación por viajeros | 17.149.370 € | 22.765.527 € |
Aportación organismos (CTM por línea 33 y transbordos metropolitanos y UGR por bonos universitarios) | 1.541.609 € | |
APORTACIÓN MUNICIPAL* | 14.917.731 € | 13.181.846 € |
(*La aportación municipal se calcula restando al coste total la recaudación de viajeros y la aportación de los organismos y sumando el déficit tarifario del Metro)
Los datos, facilitados a El Independiente de Granada por el grupo de IU, reflejan que, un año más, el esfuerzo municipal tendrá que ser aún mayor que el ejercicio anterior. En concreto, 1.735.885 euros más. Todo ello a pesar del incremento del precio del billete y la reordenación de las líneas de autobuses. A juicio del concejal de IU, Francisco Puentedura, esto evidencia el "fracaso" de la gestión de la movilidad por parte del gobierno socialista.
La aportación municipal cercana a los 15 millones de euros supondrá, dada la prórroga presupuestaria que se arrastra desde 2015, un nuevo déficit en la partida prevista en esas cuentas para pagar el servicio. En 2015 el presupuesto aprobado entonces por el PP recogió únicamente 10,2 millones para el transporte público, muy por debajo de la aportación que finalmente tiene que hacer, desde entonces, el Ayuntamiento cada año. Con las dos modificaciones presupuestarias ya aprobadas, que elevan a 11,8 millones esa partida, todavía falta para cubrir el gasto previsto este año 3.073.835 euros.
El edil de IU llama la atención sobre tres aspectos: las tarifas del transporte público han subido un 10 por ciento; el número de kilómetros -que es el que sirve para calcular el coste- ha disminuido en 77.800 kilómetros; y el coste del servicio ha bajado en 2.643.285 euros respecto al año anterior.
"¿Qué ha pasado entonces para que el Ayuntamiento tenga que poner más como subvención y se haya incrementado el déficit?" se pregunta para achacarlo a que "ha bajado de forma rotunda la recaudación, porque ha descendido de forma drástica el número de viajeros". Y ello, según Puentedura, por dos motivos: la reordenación de las líneas de bus "ha sido incompatible con el Metro, robándose viajeros" y "ha dejado incomunicados a muchos barrios".
El concejal lamenta que las consecuencias de esta situación la paguen los usuarios, "que reciben menos y peor servicio y este es más caro". Para IU, "la nefasta gestión del transporte público sigue siendo un agujero negro para la economía municipal y los trabajadores que siguen con condiciones laborales precarizadas, especialmente las de la empresas filiales Alhambra Bus y Herederos de Gómez. Sin embargo Rober sigue engordando sus beneficios por encima de los dos millones y medio de euros al año".
En la estructura de costes, además, Puentedura echa en falta las cuentas del Metro y pide transparencia al respecto.
Tras considerar que la gestión del gobierno socialista de Francisco Cuenca respecto al transporte público es "un verdadero fracaso", al no haber logrado "solucionar el agujero creado por la LAC", el concejal de IU resalta entre sus propuestas la necesidad de una reodrdanación "desde una visión metropolitana y comunicando todos los barrios de Granada", con una gestión "integrada" de Metro, buses urbano y metropolitano, y una financiación por parte de la Junta, Consorcio Metropolitano y ayuntamiento "justa y eficiente". "Solo así será eficaz y eficiente el modelo y se podrán recuperar viajeros", agrega.
Y junto a ello, establecer un modelo de gestión "pública con un verdadero modelo de billete único, garantizando los derechos laborales y continuidad en el empleo de los trabajadores, unificando transbordos y bonificaciones a pensionistas, jóvenes y universitarios, además del bonobús solidario para parados y paradas, tanto en autobuses urbanos como metropolitanos como Metro".
Plantea además recuperar la subvención al transporte público por viajero, "no con un modelo que sólo engorda los beneficios de las empresa privadas que gestionan el transporte público a costa de la calidad del servicio, la economía municipal, y los derechos de los trabajadores del transporte público colectivo".
"Recuperar la gestión pública es posible porque el contrato con Rober finaliza en 2022 y la mayoría de las líneas metropolitanas están sus concesiones en situación de prórroga. Ya se debería estar creando y negociando la estructura para la gestión pública y metropolitana implicando a la Junta en su financiación", resume.