La capital asume que habrá que renegociar el convenio de Santa Adela ante el retraso del proyecto
Según el cronograma de las obras de Santa Adela, el pasado septiembre debería haber comenzado la demolición de las viviendas para dar paso a la tercera fase de la rehabilitación integral de la barriada. Pero los diferentes retrasos que ha ido acumulando el proyecto, primero por los desencuentros entre el anterior gobierno local y la Junta, la demora de esta en firmar el convenio con el Ministerio y finalmente en enviar el dinero al Ayuntamiento han obligado a replantearse todos los plazos.
A estas alturas la licitación no está resuelta y cuando se haga, habrá que tener en cuenta que los plazos de ejecución recogidos en el pliego de condiciones, de 12 a 18 meses.
La capital ya asume tendrá que renegociar el convenio para añadir una adenda que garantice que no habrá problemas con los fondos aportados por el Gobierno central, que llegan a través de un plan de vivienda que finaliza este año y que obliga a que la obra esté finalizada antes del 31 de diciembre. Así se puso de manifiesto en la comisión de Urbanismo celebrada este martes. Ministerio y Junta ya han sido informados y el gobierno local asegura que no habrá "ningún problema" al respecto. Las dos administraciones son conscientes de la envergadura del proyecto.
A los retrasos acumulados, que complicaron el pago de realojos y mudanzas e impidieron licitar antes la obra porque el interventor exigía que estuviera ya ingresada la aportación del Ministerio -un dinero que llegó a la Junta en verano pero que esta no transfirió a la capital hasta final de año-, se une la complejidad de la adjudicación de ese contrato. Se han presentado unas 40 empresas.
Una de las protestas de los vecinos y vecinas de Santa Adela. m.rodríguez
El propio alcalde, Francisco Cuenca, recordó, a preguntas de los periodistas, que es una obra "de mucha envergadura" y que el proceso de licitación "está sometido a procedimientos legales que hay que cumplir".
Cuenca envió un mensaje de tranquilidad a los vecinos y vecinas. Según él, el Ayuntamiento está trabajando "con la máxima celeridad". Puso en énfasis en que se han superado "los conflictos" surgidos en el pasado y que "desde el primer día Santa Adela es una priioridad para el equipo de gobierno". Pero añadió que no va a permitir que "la prisa" provoque que este proyecto se haga "mal, irregularmente" y tampoco que se convierta en "una chapuza". "Están en juego las viviendas de cientos de vecinos y hay unas garantías que cumplir".
En la comisión municipal los grupos pidieron que se dejen de un lado los intereses de cada partido para centrar los esfuerzos en sacar adelante la rehabilitación. Por parte de IU se alertó de que, a más retraso, más se encarecerá el proyecto. Y también se subrayó la necesidad de mantener informados a los vecinas y vecinos.
Estos precisamente son los más preocupados por la situación. No solo por el retraso, que es lo que más les inquieta, sino por los daños que están sufriendo las viviendas desalojadas, que ya están siendo objeto de expolios.