La corporación municipal del Ayuntamiento de Lanjarón aprobó este jueves por unanimidad el rechazo al proyecto conocido como Eje Eléctrico Sur y que pretende conectar mediante cables de alta tensión los municipios granadinos de El Fargue y Benahadoux, en Almería, pasando por el Valle de Lecrín y la Alpujarra. De esta forma, Lanjarón, donde gobierna el PP, se suma a la declaración aprobada hace unos días por el vecino municipio alpujarreño de Órgiva, regido por el PSOE. 

Además, desde el consistorio cañonero se ha lanzado una convocatoria para vecinos y afectados por la instalación de las torres eléctricas de la comarca alpujarreña y el Valle de Lecrín. Será este próximo martes a partir de las 19:30 horas. 

Tras ser leídas las correspondientes alegaciones, el escrito aprobado, según informa el Ayuntamiento, recoge la solicitud de "detener un proyecto que incluso podría tener consecuencias para la salud de la población". Un plan considerado por el Ayuntamiento como “nulo de pleno derecho” al entender el ente municipal que se infringieron los procedimientos de transparencia y derecho a defensa de los interesados. 

Además, las alegaciones denuncian la inexistencia de un estudio “suficientemente objetivo” sobre las alternativas que se pueden presentar y por tanto "es inautorizable". El proyecto no ha considerado tampoco el impacto en zonas calificadas de alta calidad y vulnerabilidad como es el Valle de Lecrín o el impacto ecológico que supondría a la zona la instalación de las torres de alta tensión, según el Ayuntamiento. 

Este jueves, la plataforma ‘Di no a las torres de alta tensión en la Alpujarra’ tuvo representación en el salón de plenos del Ayuntamiento de Lanjarón, tras realizar el mismo día una concentración en el municipio de Órgiva. Además han organizado una reunión informativa este viernes 15 de febrero en el salón de actos múltiples de Lanjarón a partir de las 19:30 horas. 

El alcalde de Lanjarón, Eric Escobedo, recalcó que la decisión de adoptar una postura “totalmente contraria” al proyecto, además de por todos los motivos antes expuestos, se lleva a cabo porque “existen otras alternativas que reducirían el impacto que generaría sobre nuestro municipio y nuestra comarca”. Por su parte, la concejal y diputada Carmen Lidia Reyes sostuvo que se trata de “un proyecto que ni beneficia a Lanjarón, ni a la Alpujarra ni al Valle de Lecrín”.