Las claves de la campaña electoral en la provincia de Granada

Llamada a la movilización general, en la semana decisiva antes del 26J

Política - J.I.P. - Lunes, 20 de Junio de 2016
La campaña electoral (oficial) de las elecciones más reñidas desde la Transición pasan ya su ecuador y afronta la última semana, con un llamamiento por parte de todos los partidos a la movilización general, conscientes de la importancia de atraer hacia sus organizaciones a los indecisos y desencantados que en diciembre les pudieron abandonar. Arranca la semana decisiva que culminará el domingo 26J.
 
Movilización general. Tanto hacia los votantes como a los afiliados y simpatizantes de las propias organizaciones, como los mejores valedores para convencer al electorado. Es una de las evidencias de la campaña electoral para el 26J. A diferencia de otros comicios, en los que abundaban las reflexiones sobre a qué partido beneficiaba la abstención, hay unanimidad que en esta ocasión todos pueden perder si al menos no conservan el apoyo del pasado 20 de diciembre.
 
20D: Congreso de los Diputados:  PP, 3 diputados; PSOE, 2 diputados; Podemos, 1 diputado; Ciudadanos, 1 diputado.
20D: Senado: PSOE, 2 senadores; PP, 2 senadores.
En Granada está en juego el séptimo diputado, que el PP logró en las últimas elecciones al ganar por poco más de 700 votos al PSOE. Pero la confluencia entre Podemos e IU lo amenaza, como así constató la encuesta del CIS, y va a por su segundo representante en el Congreso. 
 
El PP, con su líder más visible, Sebastián Pérez, multiplica sus actos, en la capital y el área metropolitana. Los socialistas, no solo extienden sus actos a toda la provincia, miran, especialmente, a la capital, con la incorporación del alcalde de Granada, Francisco Cuenca, a la campaña. Unidos Podemos suma la movilización de los dos partidos que conforman la confluencia, sabedor que donde Podemos no llega en la provincia, IU cuenta con una base histórica de apoyo. Y Ciudadanos trata de rentabilizar la proyección mediática de su líder, Luis Salvador.
 
 

Lucha contra la abstención

Un total de 190.271 electores de la provincia de Granada renunciaron a votar el 20D. Una cifra excesiva que rebajó al 72,93 por ciento la participación en las urnas.  Subir tan solo dos puntos de participación reporta un buen número de votos que pueden ser decisivos en el resultado final. Por ello los partidos se esmeran en captarlos en una labor pedagógica que, primero, implica animarlos a acudir a las urnas y, luego, en elegir su papeleta.
Algún partido, incluso, cita en sus mítines alusiones a los 7.662 granadinos y granadinas que optaron en diciembre por votar en blanco o por el voto nulo –deliberado o no-. En un escenario tan reñido, cualquier aporte extra puede hacer cambiar el resultado.
 

Ideología en campaña

La campaña electoral ha permitido que se hable también de ideología, para reclamar un espacio. Difícil cuestión, puesto que como se sabe cuando un partido abandona por acción u omisión un sitio ideológico, otro lo ocupa. Y recuperarlo es complicado, si es lo que se desea.
El líder de Podemos, Pablo Iglesias, reivindicó la socialdemocracia, lo que hizo mover los cimientos del PSOE, que en todos los actos se proclama como el genuino representante de la socialdemocracia y lo muestra en su ADN. 
 
Pero Podemos concurre con IU, que cuestiona esa definición. De hecho, le ha reportado un claro marco ideológico, de izquierda, tras la etapa de Podemos en la que esquivaba definiciones.
 
El PP sigue en su sitio, en ese amplio espectro que lleva desde la derecha más conservadora a ese centro, que ahora llaman centralidad. Espacio que se disputa con Ciudadanos, capaz de pactar con el PSOE en Andalucía o con los populares en la Comunidad de Madrid.
 

El AVE irrumpe en la campaña

Sí que hay propuestas. Todos los partidos la lanzan a diario. Otra cosa es que calen en el electorado, cansado de campañas, y se fijen más en los mensajes de los líderes nacionales  y provinciales de los respectivos partidos,  y en algunos, como el PSOE y Unidos Podemos, también regionales,  dada la influencia de la socialista Susana Díaz o de Teresa Rodríguez y Antonio Maíllo, en el caso de la confluencia.
 
Entre los asuntos, el AVE irrumpió en campaña, como era de esperar. Un asunto molesto para el PP, que pese a reiterar la gran inversión en materia de infraestructuras, no cumplió con su promesa de que la Alta Velocidad llegaría a Granada, primero, antes de final de 2015, luego, en febrero de este año, y ya ante la evidencia, no sabe, no se pronuncia. Ni siquiera Mariano Rajoy en el mitin en el Mirador de San Nicolás se comprometió con su llegada para limitarse a decir que es una “prioridad”.
 
Junto a ello, por la propia incompetencia del Ministerio de Fomento, la intolerable desconexión ferroviaria de Granada, que sobrepasa ya el año.
 
El AVE abre la puerta al soterramiento, una petición unánime de la sociedad granadina, ante la que el PP, tampoco responde. La torpeza de Fomento de suspender en plena campaña el mismo día hasta en dos ocasiones la reunión prevista con el alcalde, deja en evidencia al PP. Sin olvidar que ya canceló itra con el presidente de la Diputación y al anterior gobierno municipal del PP, ni caso.
Después de las suspensiones, el martes, en la reunión en Granada de la Mesa del Ferrocarril, liderada por el alcalde, con el secretario de Estado de Infraestructuras, se esperan resultados concretos. Aunque poco se puede esperar si ni siquiera Rajoy lo anunció.
 

Puerta a puerta

El cambio de la campaña, que se vislumbró en diciembre, es la cercanía con la que los candidatos y candidatos de todos los partidos se emplean, huyendo de las grandes citas. Lo que conlleva, en ocasiones, a paseos rápidos por el centro de Granada en busca de la foto cercana que plasme una visita fugaz.
 
Reuniones con asociaciones y entidades a las que plantearles las propuestas, desde los sindicatos a asociaciones como las de afectados por fibromialgia. Y mítines exprés. Conversar con el ciudadanos o ciudadana. Ese hemos ganado.