Ha recordado el Defensor del Ciudadano, Manuel Martín, en la presentación de la memoria anual de su Oficina correspondiente a 2015, que ya en 1988, cuando dirigía el centro municipal de Servicios Sociales en la Zona Norte, al que se conoce como 'centro amarillo', los vecinos y vecinas ya padecían algunos de los problemas que se arrastran aún hoy, cuando la crisis ha golpeado especialmente al barrio. Por ello ha clamado por una solución para el distrito y ha reclamado a partidos e instituciones que fragüen por la Zona Norte.

Ha sido una de las reivindicaciones que ha planteado al presentar la memoria de actividades de la Oficina del Defensor, que atendió el pasado año 3.224 casos, casi un 10 por ciento más que el ejercicio anterior. Asegura que la crisis está dejando problemas "muy visibles" y ya "crónicos" en la ciudadanía granadina. Precisamente la crisis y sus consecuencias -problemas con las hipotecas, retrasos en el salario social- concentró el mayor número de quejas atendidas por la entidad (17 por ciento), seguida de los cortes de luz en el distrito Norte (12 por ciento). 

"Sangrante". "Una vergüenza". Así ha llegado a referirse a una situación que, como ha recordado, vulnera "hasta siete derechos protegidos por la Constitución Española y el Estatuto de Autonomía". Esta situación, que padecen familias humildes y trabajadoras, exige "sentarse a dialogar y buscar alternativas", ha apuntado para considerar positivos los pasos que se dieron en ese sentido, con algunas reuniones en las que participaron administraciones, jueces, fiscales e incluso Endesa. 

A juicio de Martín, los cortes de luz a los que ahora no prestamos atención, pero que volverán con el invierno, son un síntoma de "la enfermedad grave" que aqueja al barrio, además de la vivienda. Tras referirse a la mesa que ha impulsado el Ayuntamiento y que este mismo martes echó a andar, con la concejala de Derechos Sociales, Jemi Sánchez, y representantes de grupos políticos y otras instituciones como la Junta, una iniciativa que ve "muy positiva", ha abundado en la necesidad de que también se alcancen compromisos y se aborde la situación de "falta de control" en las viviendas protegidas y tambien las construcciones ilegales. 

Desahucios y cláusulas suelo

La vivienda, pero en otra clave, es un problema generalizado que concentra también buena parte de la actividad de la Oficina. Fundamentalmente a través del Servicio de Intermediación Hipotecaria, que atendió a 148 familias. La mitad de esos expedientes se resolvió de manera satisfactoria. Y de esos 74, se logró suspender desahucios en un 7,7 por ciento de los casos; eliminar cláusulas abusivas casi en un 27 por ciento; un alquiler social para el 11,5 por ciento; y reestructurar la deuda con el banco, en un 30,8 por ciento. 

Respecto a esos problemas ha recordado que la Oficina se ha dirigido a las entidades bancarias, con un total de 236 cartas, solicitándole que informen a los afectados por impagos de hipoteca "en un lenguaje fácilmente comprensible, adaptando la explicación a cada situación particular" e instándoles además a que dejaran sin efecto las cláusulas suelo. La respuesta, aunque positiva, "no fue la deseable".

El retraso en el pago del salario social, que acumula hasta un año de retraso; personas dependientes, con el derecho ya reconocido y que siguen sin recibir atención -34 de cada 100-, y el desamparo a las personas que padecen enfermedades mentales y a sus familias son algunos de los preocupación que recoge el Defensor del Ciudadano que completa su informe anual con movilidad, con las quejas de los usuarios de la LAC o el mal funcionamiento de las rampas para mejorar la accesibilidad; y las quejas por el botellódromo y la celebración de despedidas de soltero.