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Más de 83.000 personas siguen inscritas en las listas de desempleo de la provincia

Granada es la tercera provincia de España que menos ha reducido el paro en 2017

E+I+D+i - J. M. M. - Jueves, 4 de Enero de 2018
La provincia ha cerrado el año con 4.469 desempleados menos, un 5,1% de descenso, muy por debajo de la media española, de casi el 8%. Con ese ritmo de reducción harían falta nueve años más para que Granada volviera al nivel de paro anterior a la crisis.
La provincia cerró 2017 con un descenso del paro del 5,1%, muy lejos del 8% de media española.
P.V.M.
La provincia cerró 2017 con un descenso del paro del 5,1%, muy lejos del 8% de media española.

 

Granada ha terminado 2017 con una insuficiente reducción del desempleo. Tanto que solo hay dos provincias en España que hayan bajado el paro tan poco como Granada, en términos porcentuales.

Diciembre se ha cerrado con 4.469 parados menos en las listas de desempleo de la provincia, lo que supone un 5,1% de descenso en 2017. Únicamente Huelva (-4,8%) y Tenerife (-4,9%) ha reducido el paro menos que Granada. La media española es de casi el 8% y hay una decena de provincias que han disminuido sus listas de desempleados por encima del 10% durante el año pasado. 

La provincia tiene ahora 83.357 personas inscritas en las listas de desempleo. Sí, son menos que en los peores años de la crisis, pero también es cierto que suponen prácticamente el doble de las 42.413 que había al finalizar 2006, antes de que empezara la brutal recesión. En España, el paro actual (3,4 millones de personas, no es ni mucho menos el doble del que había en 2006 (dos millones de desempleados). 

Con el ritmo de descenso del paro de 2017 harían falta algo más de 9 años para que la provincia recuperara ese nivel de desempleo. España necesitaría 4,8 años para volver al nivel de paro de 2006. 

Además, como recuerdan los sindicatos, es un descenso del paro ligado a actividades coyunturales como las campañas de Navidad del comercio y la hostelería, y las agrícolas como la recogida de aceituna. Un empleo precario y mal pagado, que, una vez terminado, obligará a muchas de las personas contratadas a regresar a las listas de parados, con lo que la provincia seguirá con una tendencia de reducció del desempleo a cuentagotas, como ha sucedido en los últimos años.

En 2016, Granada también bajó el paro menos que la media, y lo mismo en 2015, cuando fue la segunda provincia española con menos descenso, apenas un 2,7%, y pasó lo mismo en 2014, con sólo un 1,5% de reducción, también entre las provincias con peores resultados. 

REDUCCIÓN DEL PARO REGISTRADO EN PORCENTAJE
  2014 2015 2016 2017
Granada -1,49% -2,68% -8,74% -5,09%
España -5,39% -7,96% -9,54% -7,84%

Fuente: Ministerio de Empleo

El caso es que Granada marcha a un ritmo más lento que la media en la recuperación del empleo, justo lo contrario que pasó en la crisis, que afectó a la provincia de manera más rápida y dura que al resto, producto de su débil y especulativa estructura económica, basada en los servicios coyunturales y en un desmesurado sector de la construcción. 

Con la supuesta recuperación, el único empleo que se ofrece en Granada es el de trabajos temporales ligados a los servicios y a las campañas agrícolas. No hay industria (ni la hubo antes de la crisis ni se está desarrollando ahora), la construcción crece de forma tímida y los empleos de la llamada nueva economía (tecnologías de la información, biomedicina, etc.) no tienen un volumen suficiente para que se note en las listas del paro. 

Un panorama desolador sin visos de cambio, por mucho que las administraciones públicas y las entidades empresiales promuevan pactos y mesas para desarrollar la industria o se comprometan por un empleo de calidad, movimientos que por ahora se quedan en el papel y no se traducen en proyectos tangibles y en resultados. 

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