La natalidad sigue estancada en la provincia de Granada. El año pasado se registraron 7.057 nacimientos, según los datos publicados este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Se trata de una cifra muy parecida -levemente inferior- a la de 2021, cuando hubo 7.083 nacimientos, y similar a la de 2020, cuando fueron 7.050, el mínimo de la serie histórica disponible, que empieza en 1975. 

Las defunciones continúan siendo muy superiores a los nacimientos, por lo que la población de la provincia solo crece por el efecto de la inmigración. En 2022 murieron 8.520 personas en la provincia, 247 menos que las 8.767 de 2021. Y 1.079 menos que las 9.599 de 2020, un año marcado por la pandemia y que supuso el tope más alto de fallecimientos de toda la serie histórica. 

Fuente: Instituto Nacional de Estadística

La tabla muestra el número de nacimientos y defunciones contabilizados en la provincia de Granada en lo que va de siglo XXI. Los nacimientos registraron su nivel más alto en 2008, con 10.546, justo cuando empezaba la gran crisis económica, que redujo los alumbramientos en los años siguientes hasta los 8.340 de 2013, para iniciar un leve ascenso durante varios años hasta ir cayendo de nuevo y tocar suelo en 2020, el año de la pandemia, con solo 7.050, una cifra que apenas ha variado en los dos últimos años. 

Por su parte, las defunciones se han mantenido algo más estables. Hasta 2016 siempre han sido inferiores a los nacimientos, lo que implica un crecimiento vegetativo de la población, sin tener en cuenta la influencia de la inmigración. Sin embargo, en 2017 se rompe esa tendencia y Granada lleva ya seis años consecutivos con más defunciones que nacimientos. El tope más alto, con gran diferencia, se produjo en 2020, el año que irrumpió la pandemia del coronavirus, cuando se pasó de 7.997 fallecimientos en 2019 a los 9.599 un año después, 1.602 más. 

El primer hijo, a los 30,6 años

El progresivo descenso de la natalidad se refleja en cómo ha evolucionado la tasa global de fecundidad, que indica el número de nacimientos por cada 1.000 mujeres de la provincia. En el inicio de la serie histórica del INE, 1975, esa tasa era de 78 nacimientos por cada 1.000 mujeres. Ahora está en menos de la mitad, 34,3. 

El siglo XXI comenzó con una tasa de fecundidad de 41,5 nacimientos por cada 1.000 mujeres. Ascendió hasta los 45,6 en 2008, pero la crisis iniciada ese año ha ido reduciendo esa tasa hasta los 34,3 de 2022, una cifra muy parecida a la de los dos años anteriores. 

También ha cambiado la edad media de la maternidad. El primer hijo se tiene a los 30,6 años de promedio, según los datos de 2022, igual que el año anterior y que supone la edad más alta de la serie histórica. En 1975, por ejemplo, las mujeres tenían su primer hijo con menos de 25 años de media, 24,8. La edad ha ido paulatinamente subiendo con los años y en 2013 se superó por alcanzó por primera vez los 30 años de edad para el primer hijo.