Granada Al Pedal lanza un decálogo con soluciones sostenibles para la movilidad metropolitana

Ciudadanía - IndeGranada - Viernes, 15 de Septiembre de 2017
En el XX aniversario de la Marcha en Bici con el que este colectivo, decano en la reivindicación de una movilidad sostenible, hace un llamamiento para afrontar los graves problemas que se eternizan en el tiempo.
Detalle de un carril-bici en la capital.
P.V.M.
Detalle de un carril-bici en la capital.

El próximo domingo, 17 de septiembre, se celebrará la tradicional Marcha en Bici - Vía Libre al Tranvía. Cumple su veinte aniversario y con ese motivo la asociación Granada Al Pedal, decana de los colectivos que han trabajado por una movilidad sostenible, reflexiona sobre la situación de la movilidad en el Área Metropolitana, donde según advierte, "la luz roja está encendida", y lanza un decálogo con propuestas para revertir la situación.

Recogemos a continuación el informe difundido por su coordinador, Jesús García, en el que repasa el estado de la Vega, las carreteras del Cinturón, las vías para ciclistas y caminos peatones y lamenta el 'diálogo de sordos' entre Junta y Ayuntamiento sobre la puesta en marcha del Metropolitano, además de denunciar que se obvien sistemáticamente los índices de contaminación, y lanza un decálogo de actuaciones: 

"A nadie se le escapa que son muchos años los que lleva Granada al Pedal en la promoción de una manera de desplazarse más sostenible. Hace tiempo que las alarmas suenan y la luz roja está encendida.

Por tanto no son viables parches sobre una trayectoria institucional que ha fomentado la motorización masiva, una mala calidad del aire y una desastrosa manera de entender la ordenación del territorio.

Han sido tantos nuestros intentos que el grado de frustración es muy alta y la desconfianza es tal que, en multitudes ocasiones, hemos estado tentados a tirar la toalla, lo cual en absoluto descartamos en la actualidad.

El desarrollo de la Aglomeración urbana es endiablado. Se sigue sin tener claro el modelo. Se alientan segundas y anillos de circunvalación y está presidido por un diálogo de sordos Junta-Ayuntamiento sobre la puesta en marcha del Metropolitano. Algo que no nos podemos permitir que mal funcione o no se ponga ni en práctica.

Atasco en la Circunvalación a la altura del Nevada. p.v.m.

Tanto al Norte como al Sur se han generado infraestructuras que ya están desbordando la red viaria, PTS, Hospital, Centro Comercial Nevada, por ejemplo.

Los bordes de la ciudad son unas trampas donde los pasos de peatones y ciclistas se ven continuamente entrecortados

Se ha renunciado a planificar el transporte sobre la base de lo público al mismo tiempo, que se diseña o mejora el entramado de carreteras de la comarca y Granada se ha plantado ante el Plan Andaluz de la bicicleta. Han convertido la Vega en una ensalada de combustión donde cada vez se asfaltan más caminos. Es la Vega la que ha de entrar en Granada, como decíamos hace un tiempo. Los bordes de la ciudad son unas trampas donde los pasos de peatones y ciclistas se ven continuamente entrecortados.

En el interior de la ciudad central, se dificulta circular en bici por la Carrera del Genil o la Avenida de la Constitución. Esta cuestión imposibilita tener un itinerario seguro de esta naturaleza para comunicar los distritos Zaidín y Beiro. La calle Santa Paula ha sido la opción pero es claramente insuficiente.

Es una pena porque el centro histórico y comercial, sí empieza a tener condiciones para que compartir espacios sea la lógica de la ciudad viva. No tiene nada que ver pasear por Trinidad que por el Camino de Ronda. 

Se transforma el sistema de transporte público colectivo de transversal a radial, pero no sobre un punto, sobre un círculo. Apenas se tiene en cuenta que esta, es una ciudad pequeña y se arreglarían más cosas, hablando con la gente que haciendo inversiones y gastos cuantiosos, que no sabemos muy bien a quién benefician.

Por las paradas se comenta que el LAC es un tributo claro a los vecinos del centro, nada más.

Granada obvia sistemáticamente, sus malos índices de contaminación acústica y atmosférica. 

Vive en la congestión y los barrios son terrazas hucha, paradas de autobús siempre ocupadas por quien no debe. Conductores con teléfono al volante. Contenedores por medio y en carril, por decir algo. Cajas de fruta y suciedad no solo “on air”.

Está claro, que no se utiliza el potencial universitario para poner en la órbita del siglo XXI a la ciudad y a buen seguro que está consiguiendo algo realmente pobre y que nos aleja, cada vez, más de las urbes del entorno más inmediato. 

Lamentamos haber pensado que cambiarían las tornas, que el progreso ambiental llegaría. Sabemos que la ciudad rentista está contenta, también que Granada, sin la universidad, estaría muerta.

Vamos a hacer unas propuestas simples, para quien lleva ya en la UVI illo tempore, para que alguien demuestre sin paliativos que se puede invertir esta terrible tendencia. Para dar a una oportunidad a quienes quieran cambiar nuestro futuro y compartir las bondades, en esta materia, de la política europea.

1. Participación de verdad y presupuestos sobre unas bases irrenunciables de calidad ambiental.

Se deben poner sobre la mesa unas bases de las que partir. Se han de consolidar la prioridad peatonal y extenderse a los barrios. Si Cúllar o Peligros pueden disfrutar de itinerarios de este tipo, aceras generosas, por qué no ha de tenerlo el Zaidín o la Chana.

Los proyectos han de ser evaluables y revisables. Se pueden establecer métodos a varios niveles. Opinión directa y consultas digitales, reuniones de asociaciones y colectivos, estudios técnicos y científicos también susceptibles de debate.

2. Desarrollar una verdadera estrategia metropolitana. Consorcio, Metro, Rober, Ayuntamientos.

Es insuficiente un consorcio a este respecto, hay que pasar a una autoridad única metropolitana. Con un acuerdo muy amplio que afecte a una treintena de municipios. La optimización y eficiencia de los recursos estaría garantizada.

3. A pie, bus, metro, taxi o bici. Posibilitar todos los intercambios modales pero sobre todo eliminar la necesidad de desplazarse.

Todo esto tiene que ver con la planificación del territorio. Se trata de aceptar 3.000 años después, la Vega de Granada como el elemento que vertebra la conurbación urbana.

Es una cuestión con implicaciones sobre las rondas de fase, los anillos urbanos que se crean en el secano, el agotamiento residencial de la ciudad central dada la incapacidad manifiesta de intervención en el suelo urbano consolidado.

Par extirpar, limpiar, innovar.

Los equipamientos sociales, deportivos institucionales atendiendo a los focos de interés de la población sin llegar provocar el estrangulamiento de las infraestructuras.

La elíptica del Nevada ha sido uno de los paradigmas que hemos denunciado y demuestra la imposibilidad de que prime la razón.

4. Recuperación Plan andaluz de la bici en Granada. Incluye las conexiones norte-sur por carril bici.

Queremos que urgentemente se den cuenta de los gastos a este respecto. De los planes y las inversiones. Debe normalizarse la bicicleta como un elemento imprescindible para moverse por la ciudad. Qué se haga un calendario y que se cumpla. Además se deben hacer ajusten para mejorar la trazabilidad de lo realizado. Queremos una unidad dedicada específicamente a favorecer su implantación.

  • El eje N-S no debe tener interrupciones. Camino de Ronda- Villarejo. Villarejo- Plaza Fdez. Píñar para entrar por Arabial hasta la Avda. Barcelona y Calle Palencia, incorporando entradas al PTS, aislado actualmente.
  • La Chana tiene que conectarse con el Camino de ronda y la Caleta.
  • La Cámara de Comercio y el Camino de Ronda.
  • Hay que resolver las conexiones del borde metropolitano, la permeabilidad de la Ronda Sur.
  • El nudo Neptuno Recogidas. Villarejo…
  • Creación de manzanas desmotorizadas
  • Solución centro. Gran Vía ¿Qué hacer?
  • Resolución de la zona PTS- Nevada.

5. Conexión Metro y todo lo demás. Ajuste sincero. 

Hay que comprometer esfuerzos en que todo el sistema quede integrado con el metro. Tenemos pocas noticias a este respecto ¿Podrán ir bicis en los vehículos? ¿Habrá estaciones de intercambio modal con lo que ello supone? Aparcamientos, consignas y otros servicios al ciudadano.

6. Restricciones drásticas al tráfico privado motorizado. Añadiendo a las motocicletas.

Debe quedar muy nítida la estructura de movilidad para el tráfico privado de paso, el acceso de residentes, las restricciones, según caso, también deben afectar a las motocicleta.

7. Peaje directo al diésel de acceso.

El estudio de una fiscalidad ambiental ligada a la necesidad de reducir la motorización se hace imprescindible. Que se vean claramente, como ingresos derivados de actividades molestas, van directamente a los ciudadanos más solidarios. Por su fidelidad al transporte público, por usar la bici para ir al trabajo…

Así que gravar el acceso con vehículos altamente contaminantes y que se use para abaratar buses y metro, primar los viajes compartidos…

8. Campañas de promoción de la movilidad sostenible. Educación en todos los ámbitos. Bici pública.

Hay que pasar a la acción. Estabilizar la colaboración con asociaciones y continuar el programa con los colegios e institutos. Sacar días de movilidad sostenible a los barrios. Intercambiar experiencias con otros lugares y primar a quien fomente estos hábitos, vía subvención o bonificación de ordenanzas fiscales y otras normativas.

Al mismo tiempo, establecer una entre 50 y 100 bancadas de bici pública y un parque de doscientas para lanzar su uso, con una gran campaña de promoción.

9. Creación de un observatorio en la materia en colaboración con la UGR y resto de instituciones.

El observatorio debe analizar una realidad cambiante, la evolución de usuarios y si existen trasvases desde los modos motorizados. 

10. Hacer la ciudad energéticamente renovable y reducir drásticamente los niveles de contaminación. Reducir emisiones de gases contaminantes.

Creérselo o no creérselo. Esa es la cuestión. Un problema de modelo económico sostenible. Los ciudadanos tener que saber cuál es nuestra dependencia energética, la situación en cuanto a los residuos. En la planificación nos la jugamos.

Donde no hay más remedio que soportar ruidos y donde los podemos eliminar parcialmente o por completo. Hay que ser más sensibles en cuanto a donde ubicar los elementos fijos o móviles de mobiliario urbano. No es lo mismo que la zona sea muy residencial, que haya paradas de autobús a la hora de situar elementos para el ocio. Hay racionalizar la ocupación de la vía pública. No solo de bares vive el hombre ni la mujer.

Granada está muy lejos de todo esto y por tanto Granada al Pedal pide al su toma en consideración para garantizar la salud de los habitantes de la conurbación urbana de Granada y en especial la ciudad central. En la convicción de que existe una negligencia manifiesta de los poderes públicos en Granada, Andalucía y España para abordar una problemática sobre la que se alcanzó un acuerdo a nivel planetario en aquella cumbre de París".