El director general de Infraestructuras, Sergio Arjona, y la delegada de Agricultura, Pesca y Ganadería, María José Martín, han visitado este viernes el inicio de las obras de la Agrupación de Vertidos y EDAR que posibilitará que los municipios de Huétor Tájar y Villanueva de Mesía depuren adecuadamente sus aguas residuales y eviten sanciones por incumplir la normativa europea.

Con una inversión de más de 5 millones de euros, se ejecutarán las obras necesarias para agrupar los vertidos de aguas residuales de dos núcleos urbanos del municipio de Huétor Tájar y Venta Nueva, y del del municipio de Villanueva de Mesía, que serán conducidas hasta la EDAR (estación depuradora de aguas residuales) que se construirá en Huétor Tájar, donde se depurarán las aguas y se verterán mediante emisario en condiciones adecuadas al cauce del río Genil, explica la Junta.

Las municipios de Huétor Tajar, con una población de 10.286 habitantes, y Villanueva Mesía, con 2.024, no depuran adecuadamente sus vertidos de aguas residuales y vierten directamente al cauce del río Genil sin ningún tipo de tratamiento. Esta situación provoca molestias e insalubridad y sanciones por parte de la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir, por incumplir la normativa europea.

Se paga un canon desde 2010

Los representantes autonómicos, acompañados por los alcaldes de los municipios implicados, han recordado que las obras que ahora se inician fueron declaradas de interés de la Comunidad Autónoma por Acuerdo del Consejo de Gobierno de octubre de 2010, “por lo que su financiación procede íntegramente del canon de mejora autonómico y se enmarcan dentro de los objetivos prioritarios del Gobierno de la Junta de Andalucía de alcanzar, a la mayor brevedad posible, los objetivos europeos de calidad de las aguas”. Las obras tienen un plazo de ejecución y puesta en marcha de 18 meses.

Asimismo, esta actuación va a permitir que ambos municipios cuenten con autorización de vertidos, lo que supone una reducción importante del canon de vertido para cada uno de los municipios, así como seguridad jurídica para sus alcaldes.

Tanto el director general de Infraestructuras como la delegada territorial agradecieron la colaboración de los ayuntamientos para poner a disposición los terrenos necesarios para estas obras y por facilitar todo tipo de licencias y permisos necesarios para las mismas y estimaron que la actuación generará 8.000 jornales directos.

Al tratarse de una aglomeración urbana intermunicipal, en cuanto al ámbito de tratamiento común de sus aguas residuales, la explotación de esta infraestructura hidráulica se efectuará mediante encomienda de ambos municipios a la Mancomunidad Ribera Baja del Genil.

María José Martín recordó el plan de choque que la Junta de Andalucía puso en marcha hace dos años para “dar solución al problema de depuración de la provincia de Granada, que afecta a un total de 143 municipios granadinos, de los cuales en 35 hay obras ya y en 107 se están redactando los proyectos”. “La Junta está dando solución a la depuración de aguas residuales de más de 500.000 habitantes”, precisó la delegada.