La capital afronta la demandada remodelación de la antigua Carretera de Málaga
El Ayuntamiento de Granada, con Emasagra, pone en marcha la tan demandada transformación de la antigua Carretera de Málaga. Las obras, que prevén la renovación de la red de saneamiento y abastecimiento de agua y la construcción de aceras más amplias y accesibles, la instalación de nueva iluminación y mejora de las zonas ajardinadas, se acometerán en dos fases.
La primera, entre la Rotonda de la Encina y el Puente de Zarabanda comenzarán en octubre, con una inversión de un millón de euros. El plazo de ejecución para esa primera fase será de entre cinco a seis meses
La Carretera Antigua de Málaga presenta una calzada variable constituida prácticamente por cuatro carriles, dos en cada sentido, una banda de aparcamientos en cada margen de la vía y dos aceras en ambos laterales con un ancho de más de tres metros.
Según han explicado los técnicos, la red de saneamiento discurre a gran profundidad, lo que condiciona esta transformación, que incluye también la renovación de toda la red de abastecimiento.
La segunda etapa de los trabajos se proyectará entre el tramo de Carretera Antigua de Málaga que va de calle Circunvalación de la Encina a Venta Zurita.
El alcalde, el concejal de Urbanismo y el responsable de Emasagra con los representantes de la Asociación de Vecinos de La Chana. Foto: J.A./Ayto.Granada
El presidente de la Asociación de Vecinos de La Chana, José Fernández Ocaña, se ha felicitado porque "se va a hacer realidad un cambio importante" para el barrio y, tras reconocer que este tipo de proyectos cuesta ponerlos en marcha por su envergadura, ha pedido que esa segunda fase "no se demore".
Por su parte, el alcalde de Granada, Francisco Cuenca, ha destacado que la ciudad “responde por fin” a una de las exigencias históricas de los vecinos de La Chana que "verán cómo la artería principal del barrio abandona su aspecto de carretera nacional para incorporar un imagen de modernidad y homogeneidad con el resto de las principales calles de la ciudad".
La iniciativa responde, en palabras de Cuenca, a "la política de equilibrio en la renovación de las infraestructuras de la ciudad impulsada por el actual equipo de gobierno, que tiene, entre sus objetivos, responder de forma ecuánime y por igual a las peticiones de todos los barrios de Granada".