Ayudas de hasta 2.000 euros en Granada para adecuar viviendas a personas mayores, con discapacidad o dependientes
La Consejería de Fomento y Vivienda tiene abierta una nueva convocatoria de ayudas para la adecuación funcional básica de viviendas, cuyo plazo de solicitud expira el próximo 10 de julio y que va dirigido a la adaptación de vivienda habitual a las necesidades especiales de personas mayores de 65 años, personas con discapacidad y movilidad reducida o grandes dependientes.
La subvención concedida a través de este programa ascenderá a un máximo de 2.000 euros por solicitante, de los que 1.400 euros se destinarán a la ejecución material de los trabajos y los 600 euros restantes a sufragar los honorarios de la asistencia técnica si se requieren.
Esos incentivos posibilitarán la adaptación del interior de las viviendas o la mejora de seguridad de algunos elementos de la vivienda habitual y permanente de este colectivo.
La Consejería destinó el año pasado ayudas por valor de 356.089 euros para estas reformas en Granada. Así lo ha señalado este martes la delegada del Gobierno andaluz en Granada, Sandra García, durante una visita a una de estas viviendas reformadas en la calle Arzobispo Pedro de Castro de la capital, junto al delegado de Fomento y Vivienda, José Antonio Martín, y al concejal de Urbanismo de la capital, Miguel Ángel Fernández Madrid.
La vivienda visitada este martes, propiedad de Juan Esteban Serrano y ubicada en la capital, ha acometido varias reformas, entre ellas, la sustitución de la bañera por plato de ducha, alicatado, instalación de grifería y de asideros gracias a una subvención de la Junta que supera los 1.000 euros.
Según la delegada, la provincia recibió el año pasado un total de 267 subvenciones, 20 de ellas en la capital para actuaciones que suponen mejoras en las condiciones de habitabilidad de familias mayores de 65 años o con algún miembro con discapacidad.
Casi 80 municipios de la provincia han recibido alguna ayuda de este programa que permite, entre otras actuaciones, mejoras en las instalaciones de gas y electricidad; ampliación del ancho de puertas y eliminación de barreras arquitectónicas; adaptación de los cuartos de baño e instalación de suelo antideslizante; o colocación de pasamanos en pasillos y otras obras de adecuación de la vivienda.
"Se trata de garantizar unas condiciones de vida dignas para todas las personas", ha señalado la delegada, quien ha incidido en la importancia de la colaboración de los ayuntamientos para canalizar unas actuaciones que favorecen la independencia y la seguridad de los beneficiarios.
Desde el inicio de este programa, en 2002, más de 8.500 familias se han beneficiado en la provincia de Granada de estas ayudas, con unos 11 millones de euros invertidos por el Gobierno andaluz, según ha explicado el delegado de Fomento y Vivienda.