Arantxa, geometría y color en tus accesorios
Como todos los años, me he acercado al mercado de artesanía que en estas fechas navideñas se puede visitar en La Fuente de las Batallas; en uno de mis paseos he conocido a Arantxa, artesana que, en su puesto, muestra sus creaciones en arcilla polimérica. Sus pendientes me llamaron la atención por sus formas simples y su colorido, así que decidí acercarme a echar un vistazo y charlar un ratito con ella.
Nacida en Murcia, se desplazó a nuestra ciudad para estudiar Bellas Artes y, al finalizar los estudios decidió establecerse en ella. Ha tenido muchos y diversos trabajos que nada tenía que ver con su formación o pasión por el trabajo artesano hasta que, como me explica con satisfacción,”desde hace seis años me dedico a trabajar como profesora de pintura en distintos Centros de Bienestar Social impartiendo talleres a personas mayores y hasta ahora…”
Conoció la arcilla polimérica en la academia donde se preparó las pruebas de acceso a Bellas Artes y empezó a diseñar pendientes y collares “como hobbie, para hacerme mis propias piezas y regalárselas a familiares y amigas; al acabar la carrera, entre un trabajo y otro, hubo una época en la que me quedé en paro y necesitaba ocupar las horas y ganar algo de dinero, así que comencé a dedicarme al diseño más en serio, abrí un blog y decidí mostrar mi trabajo”. En la actualidad tiene una tienda on line www.zazushop.com y podemos encontrar sus piezas en distintos puntos de venta.
Cuando le pregunto por sus referentes a la hora de elaborar sus creaciones, apunta como la mayoría de las mujeres artesanas que he ido conociendo que se ha formado de manera autodidacta.”Gracias a internet he podido tener acceso a tutoríales y a una inagotable galería de imágenes para inspirarme y tener referencias… He conocido el trabajo de otras diseñadoras de arcilla polimérica, como por ejemplo Dona Kato. Me suelo inspirar en estampados geométricos o distintos movimientos pictóricos para dar forma a mis piezas”.
Hablando de sus comienzos en este mundo y del panorama que encontró me cuenta que hace diez años lo hecho a mano estaba empezando a conocerse, se creaban los primeros blogs sobre el tema y los mercados especializados empezaban a emerger: “Pensaba que iba a ser una moda pasajera pero actualmente está más en auge que nunca y creo que se valora de verdad el trabajo hecho a mano. Además hay mucha variedad de mercados y múltiples plataformas on line donde mostrar nuestro trabajo. Yo misma pertenezco a una asociación con la que organizamos eventos relacionados con la artesanía y el diseño para promover el trabajo y dar a conocer a creadores de diferentes ámbitos”. Arantxa considera que la buena acogida que ha tenido esta iniciativa desde que comenzaron su andadura en el año 2012 es un buen síntoma del valor y el gusto por lo artesano por parte del público.
La asociación a la que se refiere es Entretanto Creando, una asociación sin ánimo de lucro que centra su actividad en Granada que organiza la muestra de artesanía y diseño Made in Granada para dar a conocer el trabajo de diseñadores y artesan@s que desarrollan su trabajo en la provincia principalmente pero que no duda en abrirse el resto del territorio nacional. Desde su página se puede acceder a los requisitos, los pasos a seguir y los plazos para participar en el mercado que realizan una vez al mes y el resto de los eventos que programan. Si queréis conocer sus propuestas, podéis hacerlo desde. asociacionentretantocreando.blogspot.com
En cuanto a la satisfacción que este trabajo le reporta, lo tiene claro: “Siempre he tenido la necesidad de expresarme a través del dibujo o la pintura por lo que poder producir y crear mi propia marca de bisutería me aporta muchas cosas a nivel creativo, el poder materializar una idea con formas y colores en piezas que luego ves que llevan clientas y amigas no tiene precio. Nunca pensé que esta aventura que inicié hace ya diez años, no dejaría de crecer; que la gente te apoye y disfrute de tu trabajo es muy gratificante. La parte menos agradable es no poder vivir exclusivamente de ello y no poder delegar aquellas tareas que menos me gustan del emprendimiento”.
Pero ella se queda con la satisfacción de que al público le guste su trabajo y con las personas, creativas y luchadoras, que ha conocido en el mundo de la artesanía con las que empezó compartiendo trucos o ideas y que se han convertido en amigas.