Activistas denuncian en el centro comercial Nevada la pobreza energética que sufre el Distrito Norte
Una acción de concienciación social en la Semana Contra la Pobreza Energética.
Fridays For Future
Algunas de las activistas con carteles en los pasillos del centro comercial.
En el marco de la Semana contra la Pobreza Energética, vecinas y vecinos afectados por los cortes de luz, en colaboración con Fridays For Future, han llevado a cabo una acción en el centro comercial Nevada para visibilizar la difícil situación a la que se enfrenta la ciudadanía en Distrito Norte.
El grupo de activistas llevó a cabo este viernes una intervención simbólica en los pasillos comerciales del centro, donde conectaron pequeños electrodomésticos mientras portaban carteles que proclamaban mensajes como "Los cortes de electricidad nos impiden tener una vida digna", "Sin luz no hay salud" o “Endesa vulnera los derechos humanos”. Mientras los transeúntes miraban asombrados, declaraban que “ya que no podemos calentar la leche o secarnos el pelo en casa debido a los cortes de luz, venimos a hacerlo aquí”.
Imágenes de la acción de protesta y concienciación llevaba a cabo en el centro Nevada. Fotos: Friday For Futures
La acción tiene lugar en el marco de la Semana contra la Pobreza Energética que las organizaciones definen como “la situación en la que se encuentra un hogar en el que no pueden ser satisfechas las necesidades básicas de suministros de energía”. Afirman que en España, según la Cátedra de Energía y Pobreza de la Universidad Pontificia Comillas, un 17% de hogares no puede mantener una temperatura adecuada en sus casa. Es decir, añaden, “que más de 8 millones de personas se ven afectadas en el Estado”.
Una de las modalidades de pobreza energética en la ciudad Granada, explican, es la que se vive en el Distrito Norte, donde viven unas 13.000 personas que son clientes de Endesa y aún así sufren cortes de luz, lo que les impide calentarse, mantener comida refrigerada o subir a un noveno piso sin ascensor. Declaran que “las personas que son electrodependientes y necesitan energía para vivir están viviendo una pesadilla al no poder conectar las máquinas que les permiten respirar”.
Las organizaciones y ciudadanía instan a poner en la agenda la pobreza energética de forma que nadie quede atrás, dado que “todas las personas deben tener derecho a los suministros básicos que les permitan vivir con dignidad”.
