Luis Salvador, alcalde de Granada con un gobierno pendiente de cerrar con sus socios
Ciudadanos y PP no han decidido aún si habrá alternancia en la Alcaldía, que desde este sábado ocupa Luis Salvador con los votos de las tres formaciones de derecha. Finalizado el pleno que ha convertido al candidato de Ciudadanos en el regidor de la capital, Salvador no ha aclarado los términos del acuerdo cerrado desde Madrid.
Si permanecerá o no cuatro años con la responsabilidad de la Alcaldía es una más de las incógnitas de este acuerdo, fraguado sin transparencia, en el que quedan por perfilar qué concejalías ocupará cada partido. Lo que parece claro, a pesar de declaraciones contradictorias en este sentido de los protagonistas, es que la ultraderecha de Vox no tendrá responsabilidades de gobierno. Al menos así lo ha asegurado el alcalde, que sitúa a representantes de esta formación en el organigrama municipal con otras funciones.
Para tratar de descifrar el acuerdo entre Cs, PP y Vox en Granada sigue siendo necesario leer entre líneas. Por ejemplo, el hecho de que Sebastián Pérez, candidato popular, se haya mostrado esquivo y haya evitado intervenir en el pleno, que ha abandonado al término de la sesión precipitadamente. El propio alcalde le había dado paso para que hablara en nombre del PP, pero ha sido César Díaz quien ha actuado como portavoz. Y en esa intervención, Díaz ha deslizado que sería una Alcaldía "para cuatro años".
"Nuestro compromiso, en primer lugar, es un gobierno del cambio que dé estabilidad y dure cuatro años, el resto lo terminaremos de cerrar la próxima semana", es lo más que se le ha podido arrancar a Salvador en su primer contacto con los periodistas.
Pendientes por tanto de que los partidos que recibieron esta misma mañana el aval de sus direcciones nacionales para este gobierno, terminen de negociar cómo gobernarán en Granada y si esas negociaciones, que se cerrarán durante las fiestas del Corpus, se harán en Granada o seguirán tuteladas.
Si finalmentee se produce la alternancia, no está claro que Sebastián Pérez tome el testigo
Lo que sí está claro es que en este reparto Ciudadanos sale con ventaja y el PP ha sido el mayor damnificado. Sebastián Pérez ha tratado hasta última hora de convertirse en alcalde, lo que no ha logrado. Si finalmente se produce esa alternancia dentro de dos años, no está claro que Sebastián Pérez sea el representante del PP que tome el testigo. Su posición, que ya era muy delicada, se debilita aún más con Luis Salvador como alcalde.
Y sobre la ultraderecha de Vox, al decálogo de medidas que ha exigido para dar sus tres votos a Salvador, habrá que despejar ahora que tipo de papel tendrá. Su portavoz, Onofre Miralles, ha hecho declaraciones contradictorias, por un lado asegurando que no entrarían en el gobierno y por otro diciendo que "estarán dentro", que "así se había pactado". De nuevo, de la interpretación que cabe hacer de las afirmaciones de unos y de otros, ante la falta de un documento que refleje las condiciones del acuerdo, se entiende que formarán parte de otros niveles dentro del organigrama municipal.