Con motivo del Día Internacional del Migrante, este 18 de diciembre, Izquierda Unida ha reafirmado su compromiso con la defensa de los derechos de las personas migrantes y ha denunciado las políticas de exclusión y xenofobia que vulneran la dignidad humana.

La formación ha insistido en la necesidad de un cambio profundo en las políticas migratorias, tanto a nivel nacional como europeo, "para garantizar un trato digno, el respeto a los derechos humanos y la plena integración de quienes llegan en busca de un futuro mejor".

La coordinadora provincial de IU en Granada, Mari Carmen Pérez, ha señalado que "los discursos de odio y las barreras impuestas a las personas migrantes no solo son injustas, sino que perpetúan desigualdades e ignoran la riqueza que aporta la diversidad". Pérez ha subrayado que las instituciones deben poner en marcha políticas que aseguren el acceso a vivienda, sanidad, educación y empleo en condiciones de igualdad.

Durante décadas fuimos un país de emigrantes

Desde Izquierda Unida han recordado que España fue durante décadas un país de emigrantes. "Millones de españoles y españolas tuvieron que marcharse a otros países para buscar trabajo y huir de la pobreza y el hambre. Es importante no olvidar nuestra propia historia para entender las dificultades y desafíos que enfrentan quienes hoy llegan a nuestro país", ha señalado Mari Carmen Pérez, subrayando la necesidad de actuar con empatía y justicia hacia las personas migrantes.

Asimismo, IU ha destacado la importancia de abordar las causas estructurales de la migración, como el expolio por parte del primer mundo, los conflictos armados, el cambio climático y la pobreza extrema, que obligan a millones de personas a abandonar sus hogares. En este sentido, han reclamado un compromiso real de los gobiernos europeos para trabajar en la construcción de un mundo más justo y equitativo.

La formación granadina ha aprovechado la ocasión para recordar que las políticas de externalización de fronteras y los acuerdos con países que vulneran derechos humanos, como Marruecos o Libia, son incompatibles con una sociedad democrática y solidaria.

Izquierda Unida anima a la ciudadanía a sumarse a las movilizaciones convocadas por colectivos y plataformas en defensa de los derechos de las personas migrantes y a rechazar cualquier forma de racismo o discriminación. "La migración es un derecho, y como sociedad debemos dar una respuesta empática, solidaria y justa", concluyó Mari Carmen Pérez.