Baldomero Oliver: "Gobernar para todos no requiere de mayorías absolutas"

Política - M.A. - Jueves, 5 de Mayo de 2016
El grupo socialista asume con "responsabilidad" y "humildad" la tarea de gobernar la ciudad con 8 concejales, tras 12 años de mayorías absolutas del PP que acaban con "el triste colofón" de haber colocado a Granada en la "vergonzante" lista de ciudades "mancilladas por la sombra de la corrupción".
Oliver saluda a Ledesma.
M.Rodríguez
Oliver saluda a Ledesma.

El pleno de investidura vivido este jueves en el Ayuntamiento de Granada "deriva de la mayor crisis de toda la historia reciente de la democracia que ha vivido el Ayuntamiento de Granada". Lo ha dicho nada más comenzar su intervención Baldomero Oliver, como portavoz del PSOE, para recordar la "excepcionalidad" de la situación.

Una excepcionalidad que obliga a actuar con "responsabilidad" para superar estos "momentos críticos", asumida en esta jornada, en sus palabras, con la elección de Francisco Cuenca como alcalde, "en la tarea común y compartida por hacer del interés general el parámetro básico de la gestión de gobierno municipal, de devolver a la ciudad de Granada la confianza en su Ayuntamiento, de eliminar cualquier sombra de duda sobre la limpieza y la transparencia de la institución municipal, en la tarea diaria de aglutinar las voluntades diversas que hoy han confluido en la necesidad de iniciar una nueva etapa en el Ayuntamiento de Granada". 

Ejercerá esta tarea el PSOE con "humildad", con "plena conciencia de las dificultades" de gobernar con 8 concejales, pero convencidos de que "la honestidad, la limpieza, la transparencias, la regeneración democrática, la calidad de los servicios públicos, la igualdad y la pluralidad son criterios para el gobierno de la ciudad que están más allá de la fría aritmética". 

Las circunstancias han hecho, ha agregado Oliver, que gobernar con 8 concejales dé ahora más "estabilidad" al Ayuntamiento que los 11 que suma el PP. Y ha aprovechado para echar la vista atrás, a los años de mayoría absoluta del PP que acaban hoy para abundar en su reflexión.

"Si algo hemos aprendido en los años de gobierno municipal del Partido Popular es que gobernar con mayorías absolutas no implica gobernar para todos, y si algo queremos demostrar es que gobernar para todos no requiere de mayorías absolutas", ha dicho el concejal socialista para añadir que, "muy posiblemente, en eso consista lo que se ha dado en llamar la nueva política: En volver de nuevo a la política. Volver de nuevo al diálogo, a la confluencia, a la búsqueda de lo que nos une, a la superación de lo que nos aleja, a convencer con la razón, a compartir, a devolver…en definitiva…a los granadinos y granadinas su ciudad, su futuro". 

En su repaso a los años de gestión popular se ha referido a la maltrecha economía municipal, que deja 300 millones de deuda financiera, que sitúan al Ayuntamiento entre "los más endeudados" de España y que dejan las arcas municipales "hipotecadas" para el futuro. Ha recordado la "caprichosa" e "irreflexiva" implantación de la LAC, que deja un transporte público "caro, ineficaz, no accesible y que fomenta la desigualdad entre los barrios". Alusión también a la disolución de Emuvyssa, la empresa de vivienda y suelo municipal; la venta de casi la mitad de Emucesa y de la Casa Ágreda. Y ha repasado la situación de servicios municipales, como el de teleasistencia, que eliminó el PP en una ciudad donde el 18 por ciento de la población supera los 65 años. 

Ese resumen a los 12 años de mayorías absolutas se ha completado con un "penoso, frustrante, innecesario e infructuoso" último año, "abruptamente interrumpido por la sombra de la corrupción", y en el que el Ayuntamiento ha quedado, en un estado "vegetativo, sin presupuestos, sin ideas, sin capacidad de reacción", con un PP "más preocupado por los problemas internos que por los de la ciudad".

"Ilusión, diálogo, honestidad y trabajo", ha ofrecido en nombre del grupo socialista Baldomero Oliver, que ha destacado el talante de los grupos de la oposición durante la negociación para que Cuenca se convirtiera en alcalde, en un "ejercicio permanente de diálogo" y de "renuncia generosa". Un buen inicio, ha dicho, para el arduo camino a recorrer ahora juntos y en el que ha pedido y confiado en que el PP sepa "dejar de ser un problema para convertirse en parte de la solución". 

Lee la intervención íntegra de Baldomero Oliver: