La capital anuncia que "amortiguará" la tasa de basura

El gobierno del PP en la capital ha anunciado que amortiguará el impacto de la tasa de basura. Lo podrá hacer, según ha explicado el portavoz del gobierno local, Jorge Saavedra, tras la reciente adjudicación del nuevo contrato, que "reduce el coste" que hay que recuperar a través de esta tasa, pasando de los 25,4 millones anteriores a 23,8. Esos 1,6 millones de diferencia son los que tratará de amortiguar el equipo de gobierno en los recibos.
Aunque la nota difundida con las explicaciones del portavoz del gobierno local, Jorge Saavedra, habla de rebaja de la tasa, el propio portavoz admite que el nuevo sistema supone un incremento. No obstante, culpa al Gobierno de España de esa subida. Así, en palabras de Saavedra, "el nuevo sistema de tasa de basuras no es una decisión municipal, sino una imposición del Gobierno de Pedro Sánchez, que obliga a todos los municipios de España a aplicar una nueva tasa de residuos".
Lo que hará el Ayuntamiento será "aplicar la tasa de la forma más individualizada posible, acercándose a la realidad de cada contribuyente, algo muy complejo, porque ningún ayuntamiento dispone de medios para medir de manera directa la basura que genera cada hogar"
"Los granadinos deben saber que este tasazo no lo ha decidido el Ayuntamiento, sino que estamos obligados por una normativa estatal impuesta por el Gobierno de Sánchez. Aun así, hemos trabajado para reducir su impacto y proteger el bolsillo de las familias", ha explicado. Lo hará el Ayuntamiento será "aplicar la tasa de la forma más individualizada posible, acercándose a la realidad de cada contribuyente, algo muy complejo, porque ningún ayuntamiento dispone de medios para medir de manera directa la basura que genera cada hogar".
Para calcular el importe, el Ayuntamiento indica que "aplicará un modelo mixto compuesto por una cuota fija y otra variable". La cuota fija dependerá del uso del inmueble, su valor catastral y su superficie, mientras que la variable se determinará a partir de un sistema de 400 cuadrículas de 325x325 metros en las que se ha dividido la ciudad, que permiten conocer la tasa de generación de residuos en la zona más próxima al inmueble.
Este modelo, desarrollado mediante técnicas estadísticas, sitúa a Granada, según el gobierno municipal, "entre las ciudades más avanzadas en la gestión de residuos y garantiza un reparto más equitativo de la carga fiscal". "No queríamos esta tasa, pero estamos obligados a adoptarla. Pese a ello, hemos conseguido que Granada tenga un modelo más justo, moderno y con un menor impacto económico para sus vecinos", ha añadido Saavedra.
"La tasa que se cobra es exclusivamente para pagar el coste del servicio, tal y como obliga la ley. No se dedica ni un solo euro a ningún otro servicio municipal", ha añadido.
El nuevo recibo de la tasa de basura será independiente del del agua y se abonará en un único pago anual el primer año de aplicación, de modo que para los siguientes ya podrá ser domiciliado.
El área de Economía ha coordinado el desarrollo técnico y la implantación del nuevo sistema de cálculo. El nuevo recibo de la tasa de basura será independiente del del agua y se abonará en un único pago anual el primer año de aplicación, de modo que para los siguientes ya podrá ser domiciliado.
El titular del recibo será el propietario del inmueble, utilizando el padrón del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) para una gestión "más precisa y actualizada". Se mantienen dos modalidades de tasa: una doméstica, para viviendas de uso residencial, y otra industrial, para inmuebles en los que se desarrollen actividades económicas. Se incorporan bonificaciones sociales y medioambientales, como reducciones de hasta el 90% para empresas de alimentación y restauración que colaboren con entidades sociales y reduzcan residuos, del 80% para familias con rentas inferiores a 1,5 veces el IPREM y del 90% para personas o unidades familiares en riesgo de exclusión social.