'La Cumbre de la Alhambra'
Casi 50 jefes de Estado y de Gobierno se reúnen en la ciudad de la Alhambra para participar en la Cumbre de la Unión Europea. Representan a la Europa más conservadora, al servicio de la gran banca y las multinacionales, un imperio financiero que pretende convertir al viejo continente en una fortaleza inexpugnable para migrantes y refugiados. Algunos, como Hungría o Polonia, se declaran abiertamente portavoces de la extrema derecha, racista y xenófoba. Es la Europa de los mercaderes, cada vez más alejada de la Declaración de los Derechos Humanos, pues da más valor a las mercancías que a las personas.
Resulta paradójico que hayan elegido la Alhambra para inmortalizar este cónclave insolidario. Todo un símbolo de diálogo intercultural y respeto a las minorías, incompatible con la Europa excluyente que estos días ocupa el palacio nazarí
Resulta paradójico que hayan elegido la Alhambra para inmortalizar este cónclave insolidario, pues recordemos que el monumento nazarí representa todo lo contrario, la convivencia de musulmanes, judíos y cristianos, durante la civilización de Al-Ándalus. Todo un símbolo de diálogo intercultural y respeto a las minorías, incompatible con la Europa excluyente que estos días ocupa el palacio nazarí.
Sus señorías saldrán sonrientes en la foto de familia, pero no entiendo el motivo de esa risa, pues con sus Leyes de Extranjería han logrado que el Mediterráneo sea la mayor fosa común del mundo. El Mare Nostrum se ha convertido en un matadero, pues sólo en lo que va de año, casi mil personas han muerto ahogadas, cuando intentaban llegar en patera. La costas andaluzas forman parte de este escenario macabro. Y lo que está pasando en nuestras costas no podemos llamarlo tragedia, sino un genocidio inducido por leyes injustas que vulneran los derechos humanos.
Sus señorías son capaces de entregar millones de euros a Marruecos o a Turquía, países que violan la legalidad internacional, para que hagan el trabajo sucio. Es decir, devoluciones en caliente de migrantes y refugiados, que no respetan el derecho de asilo.
Y no tienen escrúpulos a la hora de apoyar a gobiernos corruptos en África, para que las multinacionales del continente blanco sigan saqueando las recursos naturales del continente negro. Es el caso de Burkina Faso, Malí o Níger, donde la sociedad civil, decepcionada con la presencia francesa, ha apoyado tres golpes de Estado. Culpan a los franceses de mantener relaciones neocoloniales con los mandatarios locales, que se enriquecen a costa de la población.
La cumbre europea debería mediar para buscar una solución pactada al conflicto. Menos misiles y más palabras
La Cumbre de la Alhambra debatirá también sobre la guerra, entre Estados Unidos y Rusia, que se libra en territorio ucraniano. Cada vez parece más próxima la entrada de Ucrania en la Unión Europea, que será el paso previo para su futuro ingreso en la OTAN, bajo control de Estados Unidos. Esta incorporación no nos acerca a la paz. Al contrario, supondría una escalada en el conflicto con Rusia, que nos alejaría de cualquier salida diplomática. El propio Sarkozy, expresidente francés, ha calificado la más que probable entrada de Ucrania en la OTAN como "una provocación a Moscú". La cumbre europea debería mediar para buscar una solución pactada al conflicto. Menos misiles y más palabras. Lo deseable sería la neutralidad de Ucrania a cambio de su integridad territorial.
Y para denunciar el despropósito de la Unión Europea, que parece estar al servicio de los intereses geopolíticos y belicistas de Estados Unidos, se ha organizado en Granada la Cumbre Social, también conocida como contra Cumbre, con el lema: "Otra Granada y otra Europa son posibles".
Granada Abierta se ha unido a los más de 30 colectivos sociales y vecinales, junto a sindicatos y partidos políticos, que participan en esta cumbre alternativa para decir que es posible construir otra Europa solidaria y que vuelva a ser baluarte en la defensa de los derechos humanos.
Por cierto, es lamentable que la Subdelegación del Gobierno haya boicoteado la gran manifestación de protesta programada por los organizadores de la Cumbre Social. Una actitud antidemocrática e impropia de un gobierno que se dice progresista, pues ha vulnerado el derecho de reunión y la libertad de expresión.
A pesar de todo, la ciudad de la Alhambra se ha llenado estos días de actividades y movilizaciones para decir que otra Europa es posible
A pesar de todo, la ciudad de la Alhambra se ha llenado estos días de actividades y movilizaciones para decir que otra Europa es posible. Los participantes en la contracumbre piden resoluciones firmes y eficaces para hacer frente al cambio climático, causante de esta prolongada sequía que ha puesto en estado de alarma a nuestros agricultores. También reclaman a sus señorías que atiendan las demandas de los ecologistas, que han entregado 260.000 firmas en Bruselas para que frene el mayor "atentado ecológico" que el gobierno de Moreno Bonilla está a punto de perpetrar en el Parque Natural de Doñana
La Cumbre Social exige, por último, una Europa con voz propia, que busque un acuerdo de paz para poner fin a esta locura. Una Europa que no se deje arrastrar por Estados Unidos y Rusia a una peligrosa guerra de desgaste, que está desangrando al pueblo ucraniano. La llamada cumbre alternativa ha dicho basta ya a una política de rearme mundial, que provoca hambruna en África, recorte de gastos sociales y un agravamiento de la crisis energética, que nos lleva al precipicio.