De auténtica "chapuza" califica la CODAPA, confederación que agrupa a las asociaciones de madres y padres de Andalucía por la educación pública, la decisión del Gobierno en funciones de aprobar en el último Consejo de Ministros de julio el decreto por el que se regulan las evaluaciones finales de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) y de Bachillerato de la Lomce. 

"El decreto plantea el absurdo de enviar un año a la FP Básica a aquellos estudiantes de ESO que no aprueben la reválida", critica el presidente de la CODAPA, Francisco Mora, quien recordó que esta vía "dejará fuera del sistema educativo a aquellos estudiantes que lleguen al final de la ESO con 17 años cumplidos o por cumplir en el primer curso, la barrera de edad que establecen los requisitos para acceder a este nivel de formación".

Desde la CODAPA cuestionan "la decisión unilateral" de un Gobierno que sabe que está en funciones de seguir adelante con la LOMCE, sin consultar a la comunidad educativa, "cuando toda la sociedad está pidiendo su derogación y un Pacto Educativo".

Mora exige al Ejecutivo en funciones de Mariano Rajoy la paralización inmediata de la ley y sus decretos y pide a la Junta de Andalucía que "intente remediar el desaguisado" que generará la reválida para los estudiantes que no superen estos exámenes.

"Lo que propone el Gobierno es repetir la revalida cuantas veces sea necesario para obtener el titulo y por tanto que las familias deban acudir a academias privadas para preparar el examen, haciendo de la educación un negocio y si no obligarte ha realizar FPB al alumnado de secundaria  y FP al alumnado de Bachillerato", indica el presidente de la CODAPA.

La CODAPA, con sede en Granada, ha manifestado desde el primer momento su rechazo a una ley que "lejos de propiciar la mejora de la educación" crea mecanismos para expulsar del sistema educativo a muchos estudiantes y no garantiza principios como la equidad, pilar fundamental para una educación de calidad. “Sin equidad no puede existir calidad educativa, tal y como dice también la OCDE, recordó Mora.