El tráfico de mercancías en el Puerto de Motril ha crecido un 7,74 por ciento en los dos primeros meses del año hasta acercarse al medio millón de toneladas movidas por sus muelles. Esto supone mejores números que los registrados antes del inicio de la pandemia y, en concreto, antes de marzo del pasado año, cuando se decretó el primer estado de alarma. La Autoridad Portuaria apunta a que podría suponer un año récord.

El informe sobre movimiento de mercancías indica que, hasta febrero pasado, los graneles sólidos representan el mayor incremento, de un 120 por ciento. Así, han pasado de 70.786 toneladas el pasado año a 156.606 en 2021.

En cuanto a los graneles líquidos, han registrado un aumento del 35,56 por ciento. Hasta la fecha han movido 290.848 toneladas frente a algo más de 219.000 del año anterior.

El único descenso se ha registrado en la mercancía general, que ha pasado de las 136.000 toneladas a las cerca de 14.000 de este año. Esta disminución viene motivada fundamentalmente por la ausencia en este periodo de las líneas marítimas con Melilla, Nador, Alhucemas y Tánger, que ha impedido el tráfico ro-ro con esos puertos. 

La previsión del puerto es que este segmento pueda comenzar a recuperarse con la próxima entrada en funcionamiento de las líneas marítimas que unen Motril con el norte de Marruecos y la inclusión de una nueva con Tánger-Med.

El producto que mayor aumento ha tenido en este inicio del año hasta convertirse en uno de los principales movidos por el Puerto de Motril ha sido, dentro de los minerales no materiales, el gasoil. También se han comercializado frutas y hortalizas, conservas, aceites, papel y pasta, abonos naturales y melazas, entre otros.