La Federación Provincial de Comercio de Granada estima que la próxima apertura del centro comercial Nevada de Armilla afectará a unos 15.000 comercios y destruirá hasta 17.000 puestos de trabajo netos, de los que 9.000 serán autónomos.

Así se desprende del informe sobre los efectos económicos y sociales de la apertura de esta superficie comercial que ha elaborado el equipo técnico y jurídico de la federación y que ha sido presentado este martes en rueda de prensa por la presidenta de la Federación Provincial de Comercio, María Castillo, y el director general de la Confederación Empresarial de Comercio de Andalucía (CECA), Carlos Bejarano.

Junto a la presentación de este documento, los comerciantes han solicitado a la Administración medidas de apoyo para las pymes del comercio afectadas por este proyecto, de modo que se puedan mitigar "los notables efectos negativos" que a su juicio provocará este centro comercial, tanto para el sector, como para la generación de riqueza de las empresas locales de la zona.

Más traslados que nuevos empleos

La federación advierte a este respecto de que las previsiones de los promotores del centro comercial de crear unos 6.000 puestos de trabajo, no se corresponden con la realidad. Por una parte, explican que gran parte de los establecimientos que se instalarán en el Nevada son grandes franquicias que no crearán nuevos empleos, sino que trasladarán a trabajadores que ya están contratados en otros centros de trabajo.

Castillo ha explicado que ése es el caso del Grupo Inditex, que tiene previsto trasladar al Nevada a los trabajadores del centro comercial Serrallo Plaza, cuyos "establecimientos previsiblemente cierren", y de otros establecimientos de la capital. Se tratarían de un cambio geográfico de unos 300 empleados, junto a otros mil empleados más de otras empresas de hostelería y comercio que seguirían este procedimiento.

A ello se suma que unos 3.200 contratos se formalizarán con trabajadores ya en activo que ahora están empleados en pequeñas y medianas empresas comerciales de Granada capital y de su zona metropolitana, de modo que la federación prevé que "solo 800 puestos de trabajo sean para personal desempleado".

Los comerciantes auguran que la apertura de esta superficie comercial conlleve además la destrucción de una gran masa de empleo: Unos 7.600 trabajadores y otros tantos miles de autónomos que tendrán que cerrar sus comercios debido a la imposibilidad de competir en igualdad de condiciones.

Junto a ello advierten de que la apertura del Nevada también conllevará una reducción de la recaudación de cuotas de la Seguridad Social de más de 6,2 millones de euros y una reducción de la recaudación tributaria de unos 19,8 millones.

Efectos sociales

A las cuestiones económicas, el sector del pequeño y mediano comercio añade los "efectos sociales negativos" que pueden derivarse de la apertura de este centro comercial, como colapsos en la movilidad de la zona, concretamente en la Circunvalación y en el entorno de Armilla.

También pronostican un deterioro del comercio del centro de Granada y de otras zonas del área metropolitana, además de un "empeoramiento" de las distintas zonas comerciales urbanas actualmente existentes.

Por último, las organizaciones empresariales reclaman a los ayuntamientos que realicen un adecuado planeamiento urbanístico, a través de los planes generales de ordenación urbana (PGOU) que potencie un modelo de ciudad compacta y eviten proyectos "sobredimensionados" con impactos "muy negativos en su entorno" como a su entender ocurrirá en este caso.