Soulbop, la perfección hecha electricidad
El quinteto Soulbop llenó completamente el Teatro Isabel tanto de público entusiasta como de 'electricidad' para su actuación dentro del festival granadino de jazz. Sobre el escenario el saxofonista Bill Evans y su veterano compañero Randy Brecker, secundados por la poderosa percusión de Simon Phillips, con el respaldo de dos jóvenes superdotados como Teymor Phell en el bajo de seis cuerdas y Ormaro Ruiz ante una batería de teclados.
El festival de Granada en su trigésimo novena edición está organizado por el Ayuntamiento de la ciudad con la colaboración de la Diputación y el patrocinio de la Obra Social de la Caixa, Blinker, el Instituto Italiano de cultura y la Alianza Francesa.
Los Soulbop 011 aglutinan una inclasificable mezcla de jazz, blues y funk con una potencia similar a un concierto de rock. El encuentro de Bill Evans y Randy Brecker con un batería tan espectacular como Phillips, (ha tocado desde con Toto a The Who en la gira de 1989 o Judas Priest) deviene en una fusión de muy alto voltaje. La enorme espectacularidad de esta formación es siempre una garantía de, primero atractivo para el público y luego de un imponente concierto de altísimo nivel y diseñado para epatar, según destaca la crónica difundida por gabinete de prensa del Festival de Jazz. La complicidad de ambos líderes fue absoluta en sus intervenciones, individuales o coordinadas, con trompeta uno y tenor o soprano el otro, que no rompió la tradición de vestirse de blanco. El tercero en concordia, el baterista Phillips, motorizó el conjunto con una percusión implacable sacando mucho partido al juego de ocho timbales de su amplio instrumento. Al final del concierto el público, de pie, pidió a la banda un bis que llegó con su clásico Some Skunk Funk.
El festival continúa hoy jueves 8 con un concierto en exclusiva de la muestra presentando al autor italiano Joe Barbieri. Mañana viernes llegará otro peso pesado del programa, el bajista Stanley Clarke.
Jueves, 8 de noviembre
Joe Barbieri, guitarra y voz. Antonio Fresa, piano. Stefano Jorio, cello. Giacomo Pedicini, contrabajo. Sergio Di Natale, batería
Con un estilo único a camino entre el smooth jazz y el cool jazz, la bossa nova, la canción italiana y la francesa, la musica de Barbieri posee una riqueza no solo musical, sino linguistica y literaria y siempre en plena disposición a la belleza. Cada canción de Barbieri es un universo poético y elegante y llega al oyente de una manera subliminal pero a la vez poderosa.
Cuando Joe Barbieri lanzó su álbum debut, In Parole Povere, fue recibido enseguida con enorme entusiasmo tanto por la crítica como por el público de Estados Unidos, Canadá, Japón y Alemania, donde fue galardonado como Mejor Album del Año. En 2009, publica, Maison Maravilha, con una magnífica orquesta de cuerdas y contando como invitada estrella con Omara Portuondo. El álbum pronto recibió la aclamación de la critica más especializada en medios como Jazzthenik en Alemania, Mondomix en Francia, Critical/Jazz en USA Le Devoir en Canada, entre otros muchos
Su siguiente registro discográfico, Respiro (2012), publicado en más de 50 paises, fue grabado en el mismo apartamento donde Vitorio de Sica filmó algunas peliculas con Sylvana Mangano y Sofia Loren, esto no era solo una anecdota ya que las canciones de Barbieri parecian escenas salidas de la gran pantalla. El disco contó con la colaboracion del pianista Stefano Bollani y el cantautor uruguayo Jorge Drexler.
Un año más tarde, Barbieri realiza un bello homenaje al trompetista que vivió en Italia, por un largo e intenso período de su vida con el álbum: “Chet Baker lives!”. En esta ocasión, contó con la complicidad de Luca Aquino, Antonio Fresa, el cantautor brasileño Márcio Faraco y la colaboracion estelar de Stacey Kent (con quien comparte cartel del Festival de Jazz de Granada).
Para su siguiente trabajo, Cosmonauta del Appartamento (2015), se inspira en la poesía de Konstantinos Cavafis y elige sabiamente como compañeros de este viaje musical a las españolas Luz Casal, La Shica y al músico brasileño Hamilton de Holanda. La singularidad de este álbum, reside no solo en que en sí mismo es un viaje musical -fue grabado en distintas partes del mundo- sino porque aficionados de todo el mundo participaron enviando pistas de audio que luego se montaron en el estudio. El experimento también tuvo como objetivo concienciar a los participantes sobre la problematica de inmigración y recolectar donaciones voluntarias para el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados.
“Origami” (2017) es su grabación más reciente para la que ha contado con la colaboración del afamado trompetista Paolo Fresu. El disco será presentado, en exclusiva y por primera vez en España en el Festival Internacional de Jazz de Granada.