Una patrulla de la Guardia Civil de Trevélez ha rescatado con la ayuda de un vecino de la localidad a un montañero que se perdió en Sierra Nevada en un día de malas condiciones meteorológicas y que acabó en medio del río Trevélez en el barranco Chordí.

Sobre las 19,50 horas del pasado sábado la Central Operativa de Servicios de la Guardia Civil de Granada alertó a esta patrulla tras recibir el aviso del 112 sobre un montañero que estaba perdido y exhausto en la zona del barranco Chordí, en el término municipal de Trevélez.

El montañero comenzó su ruta en Peña Partida, en el término municipal de Güéjar Sierra, donde se encuentra un refugio a unos 2.400 metros de altitud; durante el ascenso a las altas cumbres la climatología se puso muy adversa, con niebla espesa, lluvia y nieve. A consecuencia de ello a la altura del Collado de las Buitreras, a casi 3.000 metros de altitud, se desorientó, intentó rehacer el camino y debido a la espesa niebla pasó a la cara sur de la sierra y acabó en el barranco Chordí absolutamente exhausto.

Cuando su teléfono móvil tuvo cobertura llamó pidiendo ayuda y facilitó su ubicación. La patrulla de la Guardia Civil de Trevélez, tras conocer la ubicación del desparecido se puso en contacto con un vecino de la localidad de Trevélez que tiene una explotación ganadera en una zona cercana a donde se encontraba el desaparecido, y este se ofreció a acompañar a los agentes y ayudar en la búsqueda.

Los agentes y el vecino subieron bordeando el río de Trevélez y tras llevar recorridos unos seis kilómetros localizaron al montañero dentro del río refugiado bajo un árbol, ya que en esos momentos la lluvia era intensa y la temperatura inferior a los cuatro grados.

Después de ayudarlo a salir del agua, les contó que tras nueve horas y media deambulando por la sierra estaba completamente agotado. Los agentes y el vecino lo ayudaron a llegar hasta la localidad de Trevélez, ya era la madrugada del domingo, y como el montañero había dejado su vehículo en Güéjar Sierra, le buscaron alojamiento en la localidad hasta que a la mañana siguiente un familiar lo recogiera.