Indignación y alarma vecinal en el Albaicín por la instalación de una grúa de 50 metros
Detalle de la grúa objeto de la denuncia vecinal. a.g.v.
La instalación de una grúa con un brazo de unos 50 metros ha provocado indignación y alarma vecinal en el Albaicín. Según consta en la denuncia presentada por el abogado Antonio José Vélez Toro ante la Junta de Andalucía -Delegación de la Consejería de Empleo, Empresa y Comercio-, la grúa se ha instalado en la Calle Gumiel de San José esquina con el Camino Nuevo de San Nicolás.
La denuncia, consultada por El Independiente de Granada, expone que no se han adoptado medidas de seguridad, al carecer la estructura de "anclaje suficiente". No solo porque se trata de un terreno que "no es firme", como ha detallado el abogado a este diario, sino porque está a escasos metros del lugar en el que se encontraron unos importantes restos arqueológicos romanos y es previsible que existan también bajo el lugar en el que se ha colocado la grúa, para cuya fijación no se ha utilizado hormigón.
Imagen del montaje de la grúa, que según los vecinos, se hizo sin cortar ni siquiera el tráfico.
Por ello, la denuncia vecinal advierte de que la base es "inestable" y, por tanto, existe "riesgo de vuelco dadas las dimensiones de la misma". Esta circunstancia supone un "riesgo para la vida de las personas y transitan por las inmediaciones".
Como han detallado vecinos y vecinas del entorno en redes sociales, la grúa bordea cuatro manzanas y sobrevuela viviendas -tanto cármenes como plurifamiliares-, una residencia para menores tutelados y un parque público, además de una de las principales vías de tráfico para vehículos y los propios peatones, el Camino Nuevo de San Nicolás-Santa Isabel la Real.
Su instalación, además, según han indicado los vecinos y se ve en la fotografía sobre estas líneas, se hizo sin cortar el tráfico y sin adoptar "ninguna medida de seguridad".
La instalación de la grúa se llevó este miércoles a la Junta de Distrito del Albaicín, donde la Asociación de Vecinos del Bajo Albaicín preguntó por el permiso para su instalación. No se tenía constancia y el colectivo vecinal recibió el compromiso de que se recabaría esa información.