Reactivados dos proyectos en la zona para construir un hotel y un apartahotel

Los hoteles se imponen al comercio tradicional en el entorno del Mercado de San Agustín

Ciudadanía - M.A. - Domingo, 14 de Agosto de 2016
El tradicional aspecto de la calle Mercaderes, llena de puestos de frutas y verduras, sucumbe al uso hotelero.
Los bajos del inmueble ya han sido desalojados ante su próxima rehabilitación como apartahotel.
P.V.M.
Los bajos del inmueble ya han sido desalojados ante su próxima rehabilitación como apartahotel.

Los tradicionales puestos de frutas, verduras y especias del entorno del Mercado de San Agustín y la Plaza de Romanilla, los que ponen un sello particular a la zona, destacado incluso en guías turísticas para conocer la ciudad, ceden terreno. Y lo hacen a favor de proyectos hoteleros. 

El último en la calle Mercaderes, justo frente al Mercado de San Agustín, donde desde hace más de 50 años atendían a sus clientes los Hermanos Toros, y antes sus padres y sus abuelos, estos últimos los que impulsaron el negocio familiar. Ese inmueble se convertirá en un apartahotel, según la solicitud de licencia presentada ya en el área de Urbanismo. 

El proyecto debe aún transitar mucho camino, pues sus promotores están obligados a solicitar autorizaciones a Cultura, al encontrarse condicionado por el Plan Centro. Según informaron a El Independiente de Granada fuentes municipales, esos pasos están pendientes.

En los locales donde antes se encontraban las fruterías, así como la panadería de la vía perpendicular, lucen ahora carteles que se disculpan ante sus clientes e informan del traslado a otras dependencias, en unos casos en inmuebles próximos y en otros en el propio mercado. José Manuel Toro, uno de los fruteros explicó a este diario que, aunque aún tenían varios años más de alquiler, decidieron abandonar amistosamente el local que se levantó en lo que su día fue un mercado de abastos. No era, aunque pudiera parecerlo, un alquiler de renta antigua. Pagaba más de 1.000 euros mensuales. 

Aunque ya acostumbrándose a su nueva ubicación -dejaron los locales en abril-, en sus palabras hay cierta resignación ante el avance únicamente de los negocios hoteleros y la constatación de que el pequeño comercio cede terreno. No solo en el caso de la venta de frutas o verduras, como es su caso, sino el textil, de tanto peso en otros tiempos en Granada, recuerda con amargura citando algunos nombres ligados a esos negocios, como Pepita Martín, Mari Vicente o Enrique Mejías. 

Sin paso para las mercancías y sin opción de vado

José Manuel Toro se ha mudado a una calle próxima, perpendicular al antiguo establecimiento. Aunque ahora lidia con otros problemas. Frente a las puertas del local un aparcamiento de motos que dificulta acceder a la instalación y también la entrada de mercancías.

Asegura que ha solicitado un vado para solucionarlo y que, de momento, no ha logrado la autorización municipal.

No séra el apartahotel el único establecimiento con ese uso en la zona. A escasos metros hay otro proyecto en marcha del que se lleva más de diez años hablando. Llegó a tener nombre, el Hotel Catedral, y hace un año se llegó a hablar de un nuevo impulso a través de una cadena hotelera. 

Se trata del inmueble anexo al edificio de Villamena que albergó durante años la sede de La General y posteriormente el diario La Opinión de Granada. La rehabilitación está otra vez en marcha. La licencia de obras acaba de ser concedida. 

La reactivación de la zona vuelve a retomarse un año después de la inauguración del Centro Lorca, que no ha terminado de ser el revulsivo esperado por la falta de contenido, y tras certificar el fracaso del proyecto Gourmet que el anterior gobierno local trató de poner en marcha en el Mercado de San Agustín.