La Guardia Civil ha detenido en Guadix a un individuo de 49 años de edad, vecino de esa localidad, con antecedentes policiales, como presunto autor de un delito contra la salud pública al sorprenderlo vendiendo hachís a un menor de trece años de edad que a esa hora tenía que estar en el instituto.

El Plan Director para La Convivencia y Mejora de la Seguridad en Centros Escolares contempla mecanismos de comunicación y colaboración entre la dirección de los centros escolares y la Guardia Civil para la detección y solución de problemas concretos que se planteen en el entorno escolar.

Haciendo uso de estos mecanismos de comunicación, la dirección de un instituto de la localidad de Guadix advirtió el pasado día 8 de octubre a la Guardia Civil que sospechaba que un menor del centro consumía droga, y que incluso en algún momento pudiera estar detrás de algún trapicheo entre escolares dentro del instituto. Desde el centro también informaron que dicho menor esa mañana había faltado a clase.

Los agentes del Área de Investigación de la Guardia Civil de Guadix recorrieron el entorno de dicho instituto pero no encontraron al menor, ni vieron nada sospechoso en los alrededores.

Sin embargo, al recorrer el conocido barrio de Las Cuevas, la Guardia Civil observó a un menor que se acercó a un hombre que tiene su vivienda en esa zona y al que los agentes conocían porque ya había sido detenido en ocasiones anteriores; vieron cómo intercambiaban unas palabras y cómo se separaban inmediatamente después.

Al interceptar al niño, los agentes comprobaron que se trataba del menor al que estaban buscando y que llevaba en las manos una pequeña cantidad de hachís, concretamente 12 dosis que acababa de facilitarle el hombre con el que estaba momentos antes, por lo que procedieron a la detención de este individuo por tráfico de droga.

La Guardia Civil se hizo cargo del menor, localizó a su madre y se le hizo entrega de él.

El Código Penal establece que la persona que facilite sustancias estupefacientes a menores de 18 años, disminuidos psíquicos o a personas sometidas a tratamientos de deshabituación o rehabilitación, se le impondrán las penas superiores en grado a las señaladas para dicho delito.