Detenidas dos personas por agresiones a sanitarios y vigilantes del Virgen de las Nieves y San Cecilio
Agentes de la Policía Nacional han detenido en Granada a dos personas, hombre y mujer, de 24 y 29 años de edad respectivamente, como presuntos autores de los delitos de lesiones y atentado contra la autoridad, tras haber agredido al personal sanitario y de seguridad durante el ejercicio de sus funciones en los servicios de urgencias de los hospitales Virgen de las Nieves y San Cecilio. Uno de los vigilantes sufrió lesiones graves en la cara de las que tuvo que ser intervenido quirúrgicamente.
Según explica la Policía, entre los días 5 y 7 de agosto tuvieron lugar dos agresiones a personal que se encontraba trabajando en los servicios de urgencias de los dos hospitales de la capital granadina, aunque ambos hechos no guardan relación entre sí.
El primer incidente tuvo lugar en el Virgen de las Nieves durante la madrugada, cuando un joven de 24 años que había sido trasladado al servicio de urgencias de ese centro por encontrarse “tirado en la calle” y "con claros síntomas de embriaguez" comenzó a ser atendido por el personal sanitario allí presente. El joven mostró desde un primer momento "una actitud agresiva y un lenguaje violento", dice la Policía.
Dicha persona se negó en reiteradas ocasiones a prestar su colaboración para que le realizasen las pruebas médicas necesarias o se le administrase la medicación oportuna. Igualmente, y a pesar de haber puesto en su conocimiento los riesgos y consecuencias que para su salud podría acarrear su comportamiento, el paciente persistió en su negativa a la vez que insultaba y escupía a las dos facultativas que le atendían, manteniendo en todo momento una actitud desafiante, explica la nota policial.
Llegado a este punto se solicitó la presencia de los vigilantes de seguridad con el objeto de detener la grave alteración estaba sufriendo en esos momentos el normal funcionamiento de las urgencias hospitalarias. La aparición del personal de seguridad provocó que el detenido se levantara de la camilla de una forma muy agresiva, lanzando insultos, dando golpes y destrozando material hospitalario para continuar atacando a los propios vigilantes.
Un vigilante sufrió lesiones graves
A su llegada los agentes de la Policía Nacional pudieron ver cómo el agresor se encontraba golpeando fuertemente con los puños a uno de los vigilantes mientras el otro intentaba poner fin a la agresión. Los agentes redujeron al atacante y ante la gravedad de los hechos llevaron a cabo su detención en ese mismo momento. El vigilante de seguridad que recibió el mayor número de golpes sufrió una rotura de la órbita ocular y hubo de ser trasladado a Traumatología para recibir tratamiento quirúrgico. El detenido ha sido puesto a disposición de la autoridad judicial.
Segunda agresión
El pasado día 7 tuvo lugar un incidente similar en el Hospital San Cecilio, protagonizado esta vez por una mujer de 29 años de edad que había sido trasladada en ambulancia desde la localidad de Montefrío por encontrarse bajo los efectos del alcohol y sustancias estupefacientes.
Dicha persona, mientras se encontraba a la espera de ser atendida por los servicios de urgencias, agredió a la enfermera que la iba a reconocer, y le propinó un fuerte tirón del cordón que sujetaba su tarjeta identificativa de personal sanitario. Como consecuencia de esta agresión la sanitaria tuvo que ser atendida por padecer un fuerte dolor cervical. Asimismo, la detenida agredió a los dos vigilantes de seguridad que acudieron en auxilio de la enfermera.
Las gestiones llevadas a cabo por los agentes de la Policía Nacional concluyeron con la identificación, localización y detención de la agresora, la cual se encuentra a la espera de juicio por estos hechos.
Denunciar para evitar la impunidad
Desde la Policía Nacional se recuerda que la L.O 1/2015 reformó el Código Penal y el personal sanitario en el ejercicio de sus funciones tiene la consideración legal de Autoridad, y en el mismo sentido está orientada la Instrucción 3/2017 de la Secretaria de Estado de Seguridad, para la prevención y lucha contra las agresiones al personal sanitario, que entre otras herramientas creó la figura del Interlocutor Policial Sanitario como nexo entre Policía Nacional y personal sanitario, que pretende establecer canales fluidos de comunicación, para luchar y combatir más ágilmente las agresiones.
"Para conseguir paliar e intentar acabar con este tipo de conductas totalmente reprochables legal y éticamente es fundamental que el personal sanitario denuncie hechos como el sucedido, y así evitar que este tipo de conductas queden impunes, y que sirva para que la ciudadanía tome conciencia, de que se debe tratar con respeto y nunca agredir a quien nos cuida y nos atiende cuando más lo necesitamos", afirma la Policía.