Detenida una importante banda internacional con base en Granada que introducía hachís por el litoral con potentes fueraborda
Una operación conjunta de la Guardia Civil y de la Agencia Tributaria ha permitido la desarticulación por completo de una organización criminal dedicada al tráfico internacional de hachís, al detener a todos sus integrantes y desmantelar toda su infraestructura.
Según informa la Guardia Civil, la operación, a la que se le ha denominado Rebound, se ha saldado con la detención de 15 personas de nacionalidades española y marroquí en las provincias de Granada, Málaga y Cádiz, entre ellos el cabecilla de esta organización criminal; y con la intervención de 2.723 kilos de hachís.
Durante la fase de explotación de esta operación se han realizado 9 registros domiciliarios y 3 registros en naves industriales del área metropolitana granadina y de Motril. En los registros los agentes se han incautado de 5 embarcaciones semirrígidas de 12 metros de eslora equipadas con 2 motores fuera borda de 350 CV, valoradas en más de 600.000 euros.
También han sido intervenidos 7 turismos, 2 vehículos todoterreno robados, 1 motocicleta, 4 caballos, 1 camión preparado para el trasporte de las embarcaciones y un camión pluma utilizado para botarlas al mar; y por último, documentación, ordenadores, armas simuladas, teléfonos móviles y una gran cantidad de tarjetas telefónicas.
Fardos de hachís requisados. G.C./AT
Esta organización criminal con base en Granada se dedicaba a introducir importantes cantidades de hachís en el litoral granadino utilizando embarcaciones con potentes motores fueraborda. Posteriormente trasladaban la droga en dobles fondos practicados en vehículos a distintos puntos de España, Francia y Holanda.
La organización disponía de naves industriales en distintas localidades del área metropolitana granadina donde ocultaban las embarcaciones semirrígidas. También disponía de una flota de camiones de gran tonelaje con los que transportaba estas embarcaciones hasta la costa granadina.
Una vez en la playa los tripulantes se hacían cargo de la embarcación y el cabecilla de esta red los iba dirigiendo desde tierra hasta su destino en Marruecos, donde cargaban la droga. Posteriormente esta misma persona dirigía la vuelta de la embarcación hasta la costa granadina y disponía todo el dispositivo necesario para el alijo del hachís en la playa escogida.
El hachís se ocultaba en una nave industrial de Motril desde donde lo distribuían semanas después en coches preparados con dobles fondos a toda España, Francia y Holanda.
La fase de investigación se inició el pasado mes de noviembre de 2016, mientras que la fase de explotación comenzó el pasado día 5 de enero de 2017 cuando agentes de la Guardia Civil y de la Agencia Tributaria interceptaron un alijo de 44 fardos de hachís en la playa del Cañón de Motril, detuvieron a 5 de los integrantes de esta organización y recuperaron 2 todoterrenos que habían sido sustraídos en Málaga.
Esta operación ha sido coordinada por el Juzgado de Instrucción nº 2 de Motril.
