La defensa pedirá la libre absolución del sacerdote procesado en el caso 'Romanones'

Ciudadanía - E.P. - Sábado, 23 de Julio de 2016
La defensa del padre Román M.V.C., único procesado en el llamado caso 'Romanones', en el que está acusado de abusar sexualmente de un menor de edad desde el año 2004, cuando tenía 14 años y hasta 2007, cuando ya contaba con 17, pedirá su libre absolución con todos los pronunciamientos favorables.
Pintadas en la fachada de la Iglesia del único acusado tras hacerse público el caso.
M.Rodríguez
Pintadas en la fachada de la Iglesia del único acusado tras hacerse público el caso.
Así lo ha señalado a Europa Press su letrado, Javier Muriel, quien presentará su escrito de defensa en ese sentido próximamente ante la Audiencia Provincial de Granada después de que ya hayan presentado sus conclusiones provisionales la Fiscalía de Granada, la acusación particular --que ejerce el denunciante-- y la acusación popular --La Asociación Pro Derechos del Niño, Prodeni--.
 
El padre Román ya declaró ante el Juzgado de Instrucción 4 de Granada por este caso el 11 de diciembre del pasado año, fecha en la que negó haber abusado sexualmente del menor, por el que sentía "el amor fraterno" de un sacerdote que "acoge" a las personas que acuden a su parroquia.
 
Durante su declaración indagatoria, el religioso manifestó su disconformidad con su procesamiento por un delito de abuso sexual continuado con prevalimiento, negó que mantuviera habitualmente conversaciones sobre sexualidad de "manera abierta" con el denunciante, salvo algún comentario acerca de alguna noticia concreta, y aseguró que nunca se ha exhibido desnudo ante él.
 
De hecho, no veía "explicación alguna" a la denuncia presentada por el joven, que ahora tiene 26 años, "salvo que haya algún interés económico". Sí reconoció que el menor acudía "ocasionalmente" cuando tenía entre 15 y 16 años a la casa en la urbanización Los Pinillos de Cenes de la Vega (Granada), donde, según el auto de procesamiento dictado por el Juzgado de Instrucción número 4 de Granada, "ocurrieron los hechos más graves y relevantes penalmente".
 
La Fiscalía pide para el inculpado nueve años de prisión para el inculpado, por un delito de abuso sexual continuado, agravado por el resultado de acceso carnal, por el que se enfrenta además al pago de 50.000 euros en concepto de daño moral a su supuesta víctima, de la que tendría que responder subsidiariamente el Arzobispado de Granada.
 
Por su parte, la acusación particular --que ejerce el letrado Jorge Aguilera en representación del denunciante-- entiende que además de este delito, por el que solicita diez años de prisión, también el acusado es presunto autor de otros dos delitos más de abusos sexuales, al contemplar el acceso carnal con el miembro viril, y pide por cada uno de ellos otros ocho años de prisión.
 
En total, la pena reclamada por la representación legal del denunciante se eleva a 26 años de prisión, basándose en la jurisprudencia que permite valorar ciertos episodios de abuso sexual como "individualizables", además de 50.000 euros de indemnización para la víctima y prohibición de comunicarse o acercarse a ella por un periodo de 20 años.
 
En el caso está personada además, como acusación popular, la Asociación Pro Derechos del Niño (Prodeni), que ha solicitado un total de 15 años de prisión para el único procesado, por la posible comisión de un delito continuado de agresión sexual con intimidación, violencia y prevalimiento y con acceso carnal.
 
En su escrito de acusación provisional, que Prodeni presentó este jueves ante la Audiencia de Granada, esta parte además reclama para el inculpado 15 años de inhabilitación absoluta, privación de residir en el mismo lugar que su víctima, acercarse o comunicarse con ella durante el mismo periodo, y el pago de un total de 75.000 euros en concepto de responsabilidad civil por los daños morales ocasionados al joven, cantidad de la que tendría que responder de forma subsidiaria el Arzobispado de Granada.
 

Detención y prescripción de los delitos

El caso se hizo público el mes de noviembre de 2014, cuando fueron detenidos el considerado líder del clan, el padre Román M.V.C., dos sacerdotes más y un profesor de Religión, que sin embargo quedaron después en libertad con cargos, en un caso en el que estaban imputadas inicialmente un total de doce personas.
 
El pasado mes de septiembre, la Audiencia de Granada declaró prescritos los delitos que se le atribuían a once de esas doce personas, diez sacerdotes y dos laicos, confirmando que la causa sólo debía continuar contra el padre Román M.V.C., considerado el líder del grupo.
 
Todo se precipitó después de que el joven comunicara por carta al Vaticano que había sido víctima de abusos sexuales desde los 14 hasta los 17 años por parte de este grupo de religiosos de Granada, lo que motivó que el propio Papa Francisco le llamara para pedirle perdón y ofrecerle su apoyo.
 
Tras la llamada del Papa al joven, éste formalizó una denuncia ante la Fiscalía Superior de Andalucía, que ordenó a la Fiscalía Provincial de Granada interponer 'ipso facto' denuncia contra todos los afectados.
 
El Papa se pronunció también coincidiendo con la salida a la luz de esos supuestos abusos en un vuelo de regreso a Roma tras su discurso en el Parlamento Europeo en el que señaló que "la verdad es la verdad" y "no debe esconderse".
 
El 'caso Romanones' provocó asimismo una imagen inédita del arzobispo de Granada, Javier Martínez, que se postró en el suelo ante el Altar Mayor de la Catedral para pedir perdón por los "escándalos" que afectaban entonces a la Iglesia.
 
El prelado tendrá que comparecer en el juicio que se celebre ante la Audiencia Provincial de Granada, ya que todas las acusaciones personadas han pedido que declare como testigo.