El comité de empresa de Rober ve un "grave error" extender el Metro por el Centro de Granada
El comité de empresa de Rober considera un "grave error" la voluntad de la Junta de extender una línea de Metro por el centro de Granada. Así lo expone el colectivo en las alegaciones que ha presentado al Plan de Transporte Metropolitano de Granada elaborado por la Junta, un escrito en el que reprocha la Gobierno andaluz que no contara con este colectivo, integrado por 500 trabajadores y trabajadoras, para el diagnóstico previo que dio lugar al documento.
El comité considera acertada la ampliación sur del Metro, recordando que el "mayor problema" que tiene la ciudad de Granada es el "gran flujo" de vehículos privados hacia el centro en hora punta. Y apunta la necesidad de proseguir la ampliación hacia el Norte.
Lo que no comparten los trabajadores y trabajadoras de Rober es la intención de la Junta, reflejada en el plan, de construir también una línea por el eje centro de Granada. Sería un "grave error" que replicaría el fiasco de la LAC, el sistema de movilidad que aprobó el PP en la ciudad de Granada y que provocó una gran pérdida de usuarios, al eliminar la conexión con los barrios y obligar a transbordos.
"De nuestra holgada experiencia entendemos que esto no sería más que volver a caer en desacierto que sufrimos tanto el colectivo de trabajadores como la ciudadanía en general con la implantación en el año 2014 del sistema LAC, donde se pasó de un sistema de transporte urbano transversal donde se llegaron a transportar en un año más de 34.000.000 millones de personas a uno radial teniendo como eje central una línea denominada LAC y el cual no cumplió ni de lejos con los objetivos previstos", exponen las alegaciones.
"Por parte del comité de empresa de Transportes Rober entendemos que crear una línea de Metro por el centro de la capital, análoga a la extinta LAC y que tan mal resultado dio, y analizándola a posteriori, sería volver a caer en el mismo error 10 años después y no haber aprendido de las equivocaciones, las personas usuarias se expulsan del sistema con facilidad cuando este no se adecua a sus necesidades y una vez perdido, cuesta mucho volver a recuperar a la persona usuaria de nuevo".
Recuerda las consecuencias que la construcción, que se prolongó varios años, tuvo para pequeños comercios y empresas.
"La inversión en caso de mantener el sistema actual de transporte urbano de autobús, mejorando frecuencias de paso y con la incorporación ya prevista de vehículos de cero emisiones sería mínima en comparación con las obras faraónica que se deberían acometer teniendo en cuenta que desde acera del Darro hasta el giro de Reyes Católicos con Gran vías el río Darro va embovedado y sería imprescindible el levantamiento y refuerzo de toda la plataforma con todos los problemas que a nivel técnico y de coste conlleva", agrega el comité.
Se refiere también a las consecuencias directas para el modelo de movilidad de la ciudad, pues el plan de la Junta recoge cambios para líneas de autobús que, como exponen los representantes del colectivo de conductores, funcionan bien: son las líneas 4, 8, 11, 21 y 33, además de la S2.
"Desde el Comité de Empresa de Transportes Rober entendemos que las propuestas referentes al reordenamiento del transporte urbano de autobús en la ciudad de Granada presentado en el PTMAGR es un ataque directo a la movilidad urbana, destruyendo un sistema asentado y consolidado después de haberse sobrepuesto al intento fallido de reordenación del año 2014 y a la pandemia del Covid-19"
"Desde el Comité de Empresa de Transportes Rober entendemos que las propuestas referentes al reordenamiento del transporte urbano de autobús en la ciudad de Granada presentado en el PTMAGR es un ataque directo a la movilidad urbana, destruyendo un sistema asentado y consolidado después de haberse sobrepuesto al intento fallido de reordenación del año 2014 y a la pandemia del Covid-19 y que sigue en un constante crecimiento, cuyo único hándicap respecto al Metropolitano es de fácil solución y que no es otro que el dotar de vehículos de emisiones 0, como ya está previsto a la flota de autobuses urbanos, dotar de suficientes carriles bus, una eficiente regulación de los sistemas semafóricos con prioridad de paso al transporte público, como ya lo tiene el metropolitano, tendría el mismo o mejor efecto que crear una línea de metro por el centro de una ciudad como Granada, donde no es necesario y entendemos que es un capricho sin sentido. Se propone volver a cometer los mismos errores del año 2014 creando una línea análoga a la fallida LAC pero con un coste muy elevado".
Entre otras alegaciones, el comité de empresa hace alusión también a las Zonas de Bajas Emisiones, advirtiendo de que la flota de autobuses "no está en condiciones" de cumplir las exigencia de ninguna norma y la necesidad de que los aparcamientos disuasorios sean gratuitos o su precio vaya ligado al viaje en autobús o Metro.
Hace igualmente mención a la adaptación de aceras para las rampas para personas con movilidad reducida y a la creación de una red de ciclopedal, para la que plantea propuestas alternativas.
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