Casi 40 terremotos siguieron a los tres más intensos que alarmaron a la población del área metropolitana de Granada
A partir de las 22.36 horas del martes 26 de enero, cuando se registró un seísmo de 4,2 grados ampliamente localizado en Santa Fe y ampliamente percibido por la población, se han registrado casi 40 terremotos en el área metropolitana de Granada.
Ha sido una noche intensa, en la que muchos vecinos y vecinas de Santa Fe y Atarfe han pasado la noche en espacios abiertos, fuera de sus casas, e incluso fuera de sus localidades. También en otros municipios del entorno y en la propia capital se llenaron parques y plazas. Porque tras el primer movimiento y en apenas 24 minutos, se registraron otros siete, dos de ellos de 4.2 y 4.5 grados. Este último, con apenas ocho minutos de diferencia respecto al primer temblor, fue el que desencadenó el miedo por posibles consecuencias.
Afortunadamente no hay constancia de daños personales, como informó el servicio de coordinación de emergencias 112 Andalucía. No obstante, como ya ocurriera el pasado fin de semana, sí hay desperfectos en inmuebles. Viviendas y edificios públicos, también patrimoniales -como los arcos de Santa Fe- presentan algunas grietas o desprendimientos de elementos de fachadas y techos. Son daños en principio superficiales y, hasta el momento, no se han encontrado daños superficiales.
En Santa Fe, su Ayuntamiento anunció anoche la suspensión de las clases para una inspección técnica de los centros educativos, como ha informado El Independiente de Granada. El propio alcalde, Manuel Gil, ha explicado en una entrevista con la SER que es consciente de que es una decisión que trasciende el ámbito municipal, pero ha insistido en que, por seguridad, es la opción más sensata y que, ante la situación vivida anoche, hubo que tomar decisiones.
Los científicos enmarcan estos temblores en una serie sísmica que comenzó ya hace semanas y en la que se suceden movimientos.
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